«Hemos perdido un tiempo precioso» durante los años del ‘boom’ de la construcción, porque muchos jóvenes consiguieron empleos bien remunerados pero al llegar la crisis los han perdido porque abandonaron pronto los estudios y carecen de «cualificación». Sin embargo, la Región de Murcia está preparada para cambiar el rumbo si quienes dejaron las aulas y ahora están en desempleo, y quienes son ahora mismo estudiantes se vuelcan en su preparación a través de vías como la Formación Profesional (FP). Éste es el mensaje de ‘mea culpa’ pero también de fe en el futuro que lanzó ayer el presidente de la Comunidad Autónoma, Ramón Luis Valcárcel, tras anunciar que en septiembre su Gobierno firmará con los representantes de empresarios y sindicatos un plan de impulso de la FP.

El máximo mandatario regional aprovechó el tradicional desayuno informativo que ofrece cada verano desde Lo Pagán (San Pedro del Pinatar), para aceptar errores durante los años de bonanza económica.

Valcárcel matizó que en Murcia la «intensidad» del ladrillo fue menor que en el resto de España, pero aseguró que «hemos aprendido la lección» de esta crisis y la clave ahora es trabajar para corregir una situación coyuntural pero también un déficit histórico en la Región: la baja cualificación del empleo.

Valcárcel se confesó «ilusionado y esperanzado» con el plan, que pretender dar respuesta a jóvenes que abandonaron las aulas porque veían a otros que se metían a trabajar y «ganaban un pastón, se compraban una motaco de gran cilindrada y un coche, se casaban y formaban una familia».

Las posibilidades de mantener empleos y generarlos se abren también, según las expectativas del presidente regional, en los sectores de la agricultura, el turismo «de calidad», la informática, la industria química del Valle de Escombreras, las energías renovables, el mueble o la conserva.

Otra de las prioridades que Valcárcel señaló es cumplir los compromisos de pago de la administración regional con los proveedores y ayudar a los ayuntamientos a afrontar los gastos corrientes, porque «están asfixiados».

La Comunidad «no está en suspensión de pagos», pero sí sufre «la onda expansiva» de la caída de ingresos por la crisis, aseguró Valcárcel, a quien arroparon los consejeros de Presidencia, María Pedro Reverte; Economía, Inmaculada García; y Agricultura y Agua, Antonio Cerdá durante el encuentro con la prensa en un restaurante local.

«Lo primero, las nóminas»

El presidente destacó que Hacienda dará prioridad a los pequeños proveedores. Los criterios de pago serán éstos: primero el salario de los funcionarios, «porque la nómina es sagrada»; segundo, las pequeñas empresas; y tercero, las grandes empresas, compañías «con riñón que pueden aguantar un poco más».

El principal ‘agujero’ está en el Servicio Murciano de Salud, pero Valcárcel defendió que hace una «inversión social» al mantener la atención universal a pesar de que ser la comunidad donde más crece la población inmigrante y no haber recibido del Gobierno 2.000 millones de euros por la actualización del censo. Es más, Valcárcel retó al PSOE a decir si recortaría en atención a los inmigrantes, sueldo al personal, ambulancias o servicios hospitalarios.

El presidente avanzó que negociará con las compañías aéreas para que se queden en la Región, y que Sanidad, Educación y Política Social ultiman el Plan Protege de prevención y actuación ante al aborto.

«Había que reaccionar ante la ley bodrio del aborto» y sus consecuencias «perversas», argumentó. Y dijo que se persigue evitar que las menores de 16 años aborten sin consultar a sus padres, así como facilitar familias de acogida para los bebés.

Fomento «machaca»

No habrá relevo de consejeros porque lo hacen «muy bien». Pero la apertura de la Consejería de Justicia hará que Protección Civil y Seguridad Ciudadana se incluyan en el área que llevará Manuel Campos.

Valcárcel se mostró muy crítico con el Ministerio de Fomento, por «machacar» a la Región, y con el PSOE murciano por «aplaudir». Y exigió salvar del recorte de fondos el AVE a Cartagena y Lorca, la variante de Camarillas y, en autovías, la del Reguerón, el tramo Zeneta – Santomera y la Yecla – Jumilla.

En cuanto al Trasvase Tajo – Segura, Valcárcel reprochó al presidente de Castilla La Mancha, José María Barreda, vender como «éxito político» el cambio de normas de explotación, cuando es algo periódico que debe ceñirse al plano técnico.

Y respecto a la influencia de las investigaciones judiciales por presunta corrupción en los ayuntamientos en las listas electorales del PP para las municipales de mayo de 2011, dijo que no es época de hablar de nombres. Eso sí, aseguró ser «partidario de apartar» del PP a aquéllos de los que se tenga el «pálpito» de que no han actuado bien, y «mantener» a aquéllos de los que se tenga el «pálpito» de que han obrado bien.