Además de las quejas que ha enviado el Gobierno de Rabat a España denunciando supuestas agresiones racistas por parte de la policía española, dos asociaciones marroquíes, la Coordinadora de la Sociedad Civil del Norte de Marruecos y el Comité para la Liberación de Ceuta y Melilla, han organizado varias manifestaciones de protesta. La principal fue el bloqueo del jueves a la entrada de productos frescos, pero durante varios días también promovieron concentraciones frente a la Embajada de España en Marruecos, los consulados de Nador y Tetuán y el Instituto Cervantes de Rabat.

Los miembros del Comité para la Liberación de Ceuta y Melilla se autodefinen como un colectivo que agrupa a oenegés cuyo objetivo es reivindicar la marroquinidad de Ceuta y Melilla y denunciar lo que califican de ocupación española de ambas ciudades, así como los supuestos abusos que se cometen por parte de España en la frontera. El coordinador de relaciones exteriores de esta asociación, Munaim Shauki, dijo ayer que los bloqueos pretenden también «pedir negociaciones directas entre Marruecos y España para acabar con la ocupación española de Ceuta y Melilla». Ambos colectivos están compuestos por entidades civiles y cuentan con el apoyo de los políticos de la localidad fronteriza de Nador, y sus militantes actúan principalmente en Melilla.