El primer acto de rechazo frontal contra la prohibición del ‘burka’ ya ha llegado y lo ha hecho en Lleida. La Asociación Islámica Watani para la Libertad y la Justicia ha presentado las primeras alegaciones contra la ordenanza municipal que regula el uso de velos integrales ‘burka’ y ‘niqab’ en edificios municipales y que recoge sanciones de hasta 600 euros.

La entidad ya anunció en julio su intención de presentar las citadas alegaciones, y dan al consistorio un plazo de treinta días para llegar a un acuerdo. Si el Ayuntamiento rechaza las alegaciones, Watani recurrirá a la vía judicial.

El presidente de la entidad, Mourad El Boudouhi, ha pedido respeto para los cultos de la ciudad y “para los derechos de todas las mujeres, en especial de las musulmanas que escogen libremente vestir el velo integral”. “No van en el buen camino, consideran esta ciudad una propiedad privada fuera de este país, no lo vamos a tolerar”, ha alertado.

“Pedimos que respete las leyes que han votado todos los ciudadanos en este país y que la ciudad respete los acuerdos firmados por el estado español a nivel europeo y de las Naciones Unidas sobre la libertad religiosa y de respeto a las mujeres. Nadie tiene derecho de hablar y decidir por esas mujeres”, ha señalado.

La asociación ha propuesto que cuando una mujer llegue tapada a un edificio público deba descubrirse para identificarse, si el responsable así se lo solicita. Tras la identificación, sería decisión de la mujer continuar tapada o no. Si no se descubre ante la petición, la asociación propone que se le pueda vetar la entrada, aunque insiste en que no sea multada.

El recurso fue presentado inicialmente sin abogado, ya que según el presidente de Watani los cuatro gabinetes de la ciudad especializados con los que contactó se negaron a llevar el caso. Finalmente, el despacho de abogados Abocam Abogados, de Barcelona, aceptó asesorar gratis a la asociación.
Se enquista el conflicto de la mezquita

También hoy, el Ayuntamiento de Lleida ha informado de que los dos locales que han propuesto hasta ahora asociaciones islámicas leridanas para abrir nuevas mezquitas que solventen la necesidad de locales de culto islámico en la ciudad no cumplen la normativa legal, por lo que han sido rechazados.

La alcaldesa accidental, Dolors Arderiu, ha explicado en este sentido que el local propuesto por la Asociación Watani para la Libertad y la Justicia no cumple con las condiciones que exige la Ley de Cultos, que, según ha señalado, “es muy restrictiva”.

“El representante de la asociación Watani, el señor Mourad El Boudouhi, enseñó hace un tiempo el local al alcalde de Lleida, Àngel Ros, y al gerente del área de Servicios Personales, Carles Alsinet, que pasaron la consulta al departamento de Urbanismo, el cual dictaminó que no cumplía con la normativa legal”, ha explicado Arderiu.

El local propuesto por la asociación islámica está ubicado en el barrio de Balàfia y se trata de una nave de 3.000 metros cuadrados cuyo aforo mínimo sería de 1.500 personas.

El otro local que ha rechazado la Paeria para acoger una mezquita es el que ha propuesto la comunidad islámica de la calle Nord, que quería ampliar el actual templo hacia un local adyacente. Sin embargo, el consistorio considera que dicho local tampoco cumple la normativa de la Ley de Cultos.

Boudouhi ha asegurado que ha pedido la mediación de la Generalitat para poner fin al conflicto al que se añade la propuesta de una nueva mezquita dentro de la ciudad, en vez de en el polígono industrial. “Qué quieren que construyamos una mezquita en el cielo, las mezquitas tienen que estar junto a la gente”, ha abundado.