María Dolores Sánchez. :: J. LEAL

Son once pero podrían ser muchos más. Un grupo de chavales de 14 a 16 años con graves problemas de escolarización han sido los ‘elegidos’ durante el curso académico que recién ha finalizado para participar, como primeros actores, en un proyecto consistorial con el objetivo primordial de que cursen estudios, recuperen el interés por instruirse y le hagan un quiebro al analfabetismo y a la posibilidad – muy alta – de acabar trabajando de manera ilegal – son menores – , siendo en la mayoría de los casos sobreexplotados por patronos sin escrúpulos.

Los chicos, vecinos de El Puntal, Espinardo y Guadalupe, proceden en su mayoría de familias desestructuradas y carentes de la figura paternal sobre la que recae la responsabilidad de escolarizar a sus vástagos. Un niño no decide si ir o no a la escuela, es incumbencia de los padres.

Estos afortunados, a los que la vida les está dando una segunda oportunidad, han participado en el Aula Ocupacional del Instituto José Planes de Espinardo, cuyo primer mandamiento es que dejen atrás el pasado y recuperen el interés por ir a clase, estudiar y labrarse un futuro.

En general, sus vidas han recorrido un camino difícil, lleno de baches, pero en sus manos está enderezar sus trayectorias en el taller de mecánica donde aprenden un oficio. Asimismo, realizan visitas a la Biblioteca Regional, concesionarios de coches, el parque Aqualandia y participan en diversas actividades deportivas como ping pong o fútbol sala.

Este programa piloto pretende convertirse en una herramienta contra el absentismo escolar, que registró el curso pasado 732 casos, según adelantó la concejal de Educación y Juventud, María Dolores Sánchez. De estos episodios de ‘pellas’, 421 fueron protagonizados por niños y 311 por niñas. Por otro lado, en Primaria se registraron 425 casos, por 307 en Secundaria.

Sánchez destacó asimismo que los casos de absentismo detectados en Primaria están íntimamente ligados al entorno en el que se ubican los centros, concretamente barrios marginales como Los Rosales (El Palmar), Espíritu Santo (Espinardo), La Fama o La Paz. También sobresalen zonas con importantes comunidades gitanas e inmigrantes, como El Puntal, La Alberca, Cabezo de Torres, La Ñora, San Andrés o Santa Cruz.

Sánchez añadió que los esfuerzos de integración y normalización con los colectivo gitano e inmigrante se van a redoblar, y el Secretariado Gitano tendrá un papel destacado en la iniciativa. En el municipio de Murcia se matricularon el pasado curso 45.338 menores en Primaria y 19.628 en Secundaria, informa ‘EP’.