ESTADOS UNIDOS | ARIZONA

Miles de inmigrantes apelan a la "desobediencia civil" en Arizona

los hispanos se echan a las calles para pedir una reforma integral de la migración en eeuu La gobernadora Brewer apela la decisión judicial de bloquear parte de la ley SB1070 y el sheriff Arpaio anuncia redadas

Diario de Noticias, D.N, 30-07-2010

pamplona. La felicidad momentánea por la decisión de la jueza Susan Bolton de bloquear los aspectos más polémicos de la ley SB1070 ha dado paso a la “desobediencia civil”. Miles de inmigrantes se manifestaron ayer en las calles de Phoenix, en Arizona, y en otras ciudades del país para reclamar una reforma migratoria integral. Consideran que la suspensión de varios artículos de la ley de inmigración que ayer entró en vigor es una victoria parcial que no va a detener la persecución contra el colectivo.

Los hispanos respiran tranquilos al saber que la policía no les puede detener, por el momento, por no portar documentos de residencia, pero tienen claro que la batalla no está ganada. Ayer mismo, la gobernadora de Arizona, Jan Brewer, impulsora de la ley, tenía previsto apelar la decisión de la juez Susan Bolton, mientras que el sheriff del condado de Maricopa, Joe Arpaio, anunciaba una de sus temidas redadas en un conocido sector latino de Phoenix.

Los ánimos en Arizona están lejos de calmarse. Al son de tambores y ondeando banderas de Estados Unidos y de México, los manifestantes iniciaron ayer la protesta frente al tribunal federal de Phoenix y posteriormente se dirigieron, bajo una fuerte vigilancia policial, hasta las oficinas del sheriff Arpaio. El temor de las autoridades era que los manifestantes se dirigieran a la cárcel de carpas (Tent city) del controvertido sheriff, que desde hace años aplica la forma más estricta de todas las leyes migratorias posibles. Arpaio advirtió el miércoles que no estaba dispuesto a permitir que “mantengan como rehén” su prisión y amenazó con meter en la misma a quienes bloquearan la entrada. Asimismo, anunció su décimo séptima “operación para la supresión del crimen/inmigración ilegal”, que bautizó como operación número 1o7o, un claro guiño a la ley SB 1070, del que es férreo defensor.

Detenciones Durante las manifestaciones de ayer fueron detenidas al menos diez personas, entre ellas el ex senador por Arizona Alfredo Gutiérrez. “Es un buen día para ser arrestado”, bromeó. “Vamos a desafiar esta ley, vamos a seguir en la lucha”, dijo el ex senador demócrata, haciéndose eco de la opinión de la mayoría de los grupos proinmigración que, si bien celebraron la suspensión temporal de los aspectos más controvertidos de la norma, calificaron ese paso como una “victoria parcial” y abogaron por continuar las protestas. “La realidad es que en este clima de odio, los gobernantes de este estado quieren aplastar a nuestra comunidad, quieren deportarnos y forzarnos fuera de nuestro estado”, explicó Gutiérrez antes de su arresto. “Nada ha cambiado, sólo tuvimos una victoria momentánea”, agregó en referencia a la apelación de Brewer contra la decisión judicial.

En el mismo sentido se manifestó el propio presidente estadounidense, Barack Obama, que ayer acudió a un programa de televisión matutino, donde aseguró que “sigue habiendo discriminación y racismo en Estados Unidos, pero estamos progresando”.

La protesta de Arizona es sólo una de las decenas que se celebraron en otras ciudades de Estados Unidos, en el marco de un movimiento nacional que ayer dio una nueva demostración de fuerza. Los hispanos están cada vez más unidos y más fuertes en su lucha. Exigen una reforma migratoria integral. Su mensaje es claro y su actitud determinante: se sienten abandonados y piden a Obama que cumpla su promesa electoral. Pero el presidente, incapaz de encontrar los votos necesarios que permitan regular el problema, se enfrenta a la oposición del Partido Republicano.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)