testimonio | josé luis david de campos

«Decidí cobrar el paro todo junto y volver a Uruguay»

La Voz de Galicia, Juan Ventura Lado, 03-07-2010

De Campos trabaja de albañil desde niño, los últimos seis años lo hizo en Carballo, y ahora seguirá en Montevideo

De Campos trabaja de albañil desde niño, los últimos seis años lo hizo en Carballo, y ahora seguirá en Montevideo

José Luis De Campos Morales acaba de regresar a su Montevideo natal desde Carballo, adonde llegó hace seis años para seguir los pasos de una de sus hijas, que se casó con un descendiente de bergantiñán. La experiencia al otro lado del charco no le salió como esperaba y, ahora, con 52 años, está tratando de reemprender la vida que metió en la maleta para viajar a Galicia.

«Decidí cobrar el paro todo junto y volver a Uruguay. Dentro de lo que cabe voy bien, porque antes de irme llevaba toda la vida trabajando de albañil. Dejé muy buenos clientes que nada más llegar ya me estaban llamando y enseguida empecé a trabajar», comenta José Luis, quien ahora centra sus preocupaciones en recuperar las pertenencias que mandó desde España y en encontrar una casa para vivir. «Lo del alquiler está muy bravo. Sin un aval es imposible conseguir nada. Yo tengo un terreno, pero sin empezar a construir y, de momento, medio estoy en el aire», añade.

Antes de irse, este hombre, casado y padre de cuatro hijos, decidió acogerse a la opción que le ofrece el Inem a los emigrantes para que cobren el paro todo junto y vuelvan a su país, pero ahora se siente estafado en parte: «Las autoridades no informan de lo que significa regresar. Aquí cualquier movimiento significa dinero. Un despachante de aduanas cobra 100 dólares diarios solo por hacer las gestiones. Si hubiese sabido lo que me iba a costar traer el contenedor con mis pertenencias lo habría regalado todo. Por levantarlo en el puerto ya he pagado más de 1.500 dólares y eso sin contar el vehículo. Con ese dinero en la mano, podría comprar uno sin problemas».

Los trámites consulares tampoco responden exactamente al camino de rosas que le vendieron en la embajada cuando se decidió a retornar. «El dinero del paro que se supone que debería haber cobrado el 25 de junio, se va a demorar entre 30 y 90 días más, según me han informado. Además, no es como la gente piensa. Recibes el 40% al irte y el otro 60% te lo envían después. Está claro que sin esa cantidad todavía resulta más difícil volver a empezar», señala.

A falta de unos días para tomar el avión de regreso, José Luis comentaba en Carballo que por él no se iría, dado que tiene facilidad para adaptarse «en cualquier lugar en el que haya trabajo». Sin embargo, su familia nunca llegó a acostumbrarse del todo a residir en Galicia y, al final, hicieron las maletas. En España solo quedaron dos de sus hijos, pero parece que no por mucho tiempo, porque tal como le manifestaron «están deseando volverse».

Durante su estancia en Bergantiños, De Campos hizo poco más que trabajar, «a veces sin contrato y a veces también sin cobrar». De hecho, cuando se fue, aún le debían dinero.

Ahora, de vuelta en Montevideo, sus expectativas siguen siendo más o menos las mismas. Solo aspira a mantener la actividad para que no le falte el sustento, con la idea de levantar algún día su propia casa y con la intención de que sus hijos encuentren las oportunidades que no tuvieron en España.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)