La marea municipal que comenzó en los ayuntamientos de Cataluña y se está extendiendo al resto de España para prohibir el uso del burka o velo integral islámico llegará la próxima semana al Senado en forma de moción del PP. Ayer, la portavoz socialista en la cámara alta, Carmela Silva, desveló que el PSOE está preparando «una moción alternativa» a la de los populares, cuya actuación en este sentido calificó como «populista» y «demagógica».

El texto que presentó la presidenta de los populares catalanes, Alicia Sánchez-Camacho, para su debate en el próximo Pleno tiene muchas posibilidades de prosperar, como señalaron fuentes de otros grupos. CiU se ha mostrado a favor de la prohibición y ambas formaciones, con UPN, están a un escaño de la mayoría.

Por eso, el PSOE no se quiere quedar descolgado y está preparando un texto alternativo que limite el uso de la prenda porque «es un elemento de discriminación de la mujer». Sin embargo, no recogerá probablemente la prohibición pura y dura, como pide el del PP, sino su limitación y «no desde la imposición», dijo crípticamente Silva.

La portavoz socialista fue preguntada por este asunto en un desayuno informativo del Fórum Europa y aseguró que la actitud del PP al presentar la moción ha sido «vergonzosa».

Silva recordó que la senadora del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) Judith Alberich anunció que iba a presentar una moción pidiendo que se prohíba la prenda. Después, fue desautorizada tanto por el PSC como por su grupo, la Entesa Catalana de Progrés.

«A las dos horas», enfatizó la senadora del PSOE, «Alicia Sánchez-Camacho presentó la misma moción; me parece muy grave, populista y demagógico», aseguró.

Silva matizó que «los socialistas están totalmente en contra del uso del burka porque es un elemento de sumisión de la mujer» y «va contra la igualdad». Pero enfatizó también que éste es «un debate importante, pero en España, casi inexistente».

«¿Alguien ha visto alguna vez un burka en España?», preguntó a su auditorio durante su conferencia en el hotel Ritz de Madrid, «estoy segura de que no».

Por eso, abogó por regular la prenda que tapa completamente el rostro y el cuerpo de la mujer, pero «no desde la imposición». Y añadió molesta que «no permitiremos lecciones del PP sobre igualdad».

Fuentes del Grupo Socialista se negaron a dar más detalles sobre el texto que el PSOE aún no ha empezado a negociar con los demás grupos y avanzó que se conocerá en los próximos días.

El presidente de CiU, Artur Mas, se mostró ayer claramente partidario de la prohibición del burka en todos los espacios públicos y en la calle, aunque reconoció que en este último punto hay cuestiones legales que pueden dificultarlo.

El líder de CiU avaló así las iniciativas que se han impulsado desde diversos ayuntamientos catalanes y al preguntársele si lo prohibiría en la calle dijo: «Sería partidario de prohibirlo en el espacio público en general, por supuesto en los espacios públicos interiores como escuelas, hospitales y centros cívicos, y en general también intentaría ir hacía aquí, pero hay que ver si desde un punto de vista de la legalidad aguanta o no».