La prohibición del burka se extiende

El Correo, 15-06-2010

Que se vea la cara. Éste es el espíritu que rige el decreto firmado ayer por el alcalde de Barcelona, el socialista Jordi Hereu, para prohibir los velos integrales como el burka (con rejilla en la cara) y el niqab (sólo deja al descubierto los ojos) en todos los equipamientos públicos de la ciudad. Hereu justifica su orden «en un principio básico como es la identificación de la persona que accede» a cualquier instalación municipal. Por tanto, deberán llevar el rostro descubierto los usuarios de mercados, bibliotecas, centros cívicos, jardines de infancia, museos municipales o centros de servicios sociales. En estos espacios se vetará la entrada a personas con velos «o cualquier elemento que impida su identificación». Los plenos de Tarragona y Reus acordaron sendas iniciativas en el mismo sentido.

El alcalde de Barcelona detalló que ahora será necesario modificar los reglamentos de todas las instalaciones locales, aunque en algunas la normativa ya esta actualizada. Un ejemplo es el museo Picasso, de titularidad municipal. Por razones de seguridad impide la entrada de «quienes vayan con la cara tapada, con casco o disfrazados». Jordi Hereu señaló que su decreto no afecta al espacio público, ya que no es competencia municipal. Aunque los máximos dirigentes del PSC, con el presidente Montilla a la cabeza, no parecen dispuestos a legislar en este sentido, el alcalde barcelonés manifestó que sería conveniente una regulación general en este sentido, «que tendría que emanar del mismo Parlamento».

Con el decreto de la Alcaldía, la Ciudad Condal se suma a los acuerdos ya adoptados en este mismo sentido por otros municipios catalanes. El primero en hacerlo fue, el pasado 28 de mayo, el Ayuntamiento de Lleida mediante una decisión adoptada por la mayoría del pleno. El municipio tarraconense de El Vendrell tomó, el pasado viernes, un acuerdo idéntico. Y es que el debate sobre la conveniencia de prohibir vestimentas que ocultan la cara se extiende por toda Cataluña. Ayuntamientos, diputaciones y consejos comarcales discuten estos días al respecto. Lo hacen a propuesta del PSC, CiU, PP o de Plataforma por Cataluña. Iniciativa por Cataluña (la versión catalana de IU) y ERC están en contra.

Así, el pleno municipal de Girona tumbó ayer mismo una iniciativa del PP para abolir el velo en las instalaciones municipales. La discusión proseguirá a lo largo de los próximos días en los consistorios de Cunit, Mollet del Vallès, Balaguer, Tarrasa, Vic, Manresa, Olot, Cervera, Tàrrega, en la Diputación de Lleida y en el Consejo Comarcal de la Segarra. Además, el debate llegará al Senado de la mano del PP, que reclama el veto del burka y del niqab en la calle. La senadora y presidenta de los populares de Cataluña, Alícia Sánchez – Camacho, ha anunciado que el día 22 presentará en la Cámara Alta una moción para regular el uso de estas prendas «en espacios o acontecimientos públicos que no tengan una finalidad estrictamente religiosa».

Mientras los socialistas catalanes consideran que con la regulación municipal es suficiente, la líder del PP catalán opina que «no se puede dejar la iniciativa» a los consistorios, ya que se trata de una «cuestión de inmigración a nivel nacional» y, por tanto, no se debe legislar «de manera diferente» en cada municipio.

La postura de CiU es similar. La concejal de los convergentes en el Ayuntamiento de Barcelona Mercè Homs abogó ayer por extender el veto a la calle. Frente a quienes sostienen que son muy pocas las mujeres que pasean con la cara cubierta para argumentar lo innecesario de la prohibición, Homs reclamó para la política «un gesto de proacción. Hay que anticiparse y no esperar a que haya un gran colectivo de mujeres con burka para abordarlo».

Esta concejala de CiU no habló a modo particular. El secretario general de su partido, Josep Antoni Duran i Lleida, aseguró ayer que si los próximos comicios catalanes llevan a Artur Mas llega a la presidencia de la Generalitat, se abordará la cuestión la regulación del uso del burka en espacios públicos de Cataluña. Para Duran i Lleida, los velos que ocultan el rostro femenino representan «un atentado a la dignidad de la persona».

Al Tribunal Constitucional

Entre la cascada de reacciones que provocó el decreto del alcalde de Barcelona figura la del presidente de la Unión de Centros Islámicos de Cataluña, Noureddine Ziani, quien tildó de «falso» el debate sobre el velo integral: «Ni musulmanes ni catalanes nos lo habíamos planteado hasta ahora», afirmó.

Por su parte, los líderes espirituales de once mezquitas catalanas plantean llevar al Tribunal Constitucional los acuerdos abolicionistas, porque «la libertad religiosa es un derecho y cualquiera no puede legislar sobre ello». Frente a esta consideración, el alcalde de Barcelona expresó que la prohibición «no es un atentado contra ninguna creencia religiosa». Hereu aseguró que la medida responde a la aplicación del «sentido común» y a razones «de seguridad».

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