Maalouf, un defensor de la diversidad cultural

El Universo, 13-06-2010

El narrador y ensayista libanés Amin Maalouf es una de las voces más importantes de la literatura árabe y un gran defensor de la diversidad cultural y los valores universales frente al fanatismo.

“Hemos entrado en este siglo sin brújula”, mencionó durante la presentación, el pasado año, de su último libro en español, El desajuste del mundo. Cuando nuestras civilizaciones se agotan. Un título que hace referencia a su preocupación constante por la relación entre Oriente y Occidente.

“Creo que estos problemas y desajustes vienen del agotamiento simultáneo de dos modelos sociales, el del mundo occidental y el del mundo árabe”, precisó este escritor y periodista, que se expresa en francés y vive en París desde 1976.

Maalouf, cuya obra se centra en Oriente Próximo, es autor de novelas como León, el africano, Samarkanda o La roca de Tanios, premio Goncourt 1993.

Todas ellas poseen un sesgo histórico y político, un aspecto que ha señalado el jurado al destacar que con su obra Maalouf sitúa al lector “en el gran mosaico mediterráneo de lenguas, culturas y religiones, para construir un espacio simbólico de encuentro y entendimiento”.

Al conocer la noticia del galardón que concede la Fundación Príncipe de Asturias, Maalouf, además de su alegría, manifestó la importancia que el país anfitrión de los premios, tiene para él: “España siempre ha estado presente en mi obra, no solo porque es la patria del héroe de mi primera novela, León el Africano (basado en un intelectual árabe de la Granada cristianizada), sino también y, sobre todo, porque ha sido lugar de encuentro emblemático, que se ha mantenido durante siglos entre las tres grandes religiones del Mediterráneo”, manifiesta el escritor.

Además, “en nuestra época España también ha sido el laboratorio de una renovación democrática ejemplar”.

Por todo ello, el autor libanés se siente “feliz y orgulloso” de encontrarse, “gracias al prestigioso galardón, aún más cercano a este gran país y a su cultura”, que, recuerda, tanto han inspirado sus libros.

Desde París, y en conversación telefónica, el escritor adelantó que viajará a Oviedo a recoger el galardón, que tradicionalmente se entrega en octubre, y que lo conocía porque “había oído hablar otros años de otros premiados”, como Günter Grass, Arthur Miller, Paul Auster, Juan Rulfo o Mario Vargas Llosa.

Nacido en Beirut el 25 de febrero de 1949, durante sus primeros 27 años vivió en un ambiente árabe y musulmán.

Su padre, poeta, pintor y periodista, fundó dos diarios en la capital libanesa.

Después de cursar estudios de economía política y sociología en la Universidad Francesa de Beirut, ejerció el periodismo en el diario An Nahar International antes de exiliarse a París a raíz de la guerra civil libanesa.

En Francia continuó con el periodismo como redactor jefe de la revista Jeune Afrique y en 1983 publicó su primer libro, Las Cruzadas, vistas por los árabes, un ensayo sobre ese período histórico.

A partir de ese momento, su obra estará marcada por las experiencias de la guerra civil y la inmigración, y sus personajes serán principalmente viajeros entre tierras, lenguas y religiones diferentes.

En 1986 publicó su gran éxito, un relato sobre las aventuras y desventuras de Hassan al – Wazzan, un viajero del siglo XVI conocido como León, el Africano.

Su siguiente trabajo literario, Samarkanda (1988), está inspirada en las vidas del poeta y astrónomo persa Oman Jayyám, nacido en 1030; del estadista Nizam el – Molk y del místico y visionario ismaelí Hassan Sa – bbah.

Dos años después publicó Los jardines de Luz, con la fórmula mixta de ficción e historia, en la que describe el itinerario del profeta Mani, fundador del maniqueísmo y pintor, que vivió en Mesopotamia en el siglo III.

Le siguió en 1992 El primer siglo después de Beatriz, donde el escritor marca un notable cambio de estilo.

En 1996 publicó en español su libro Las escalas de Levante. Para Maalouf, la característica esencial de esta novela es el desgarro al que se ve sometido su protagonista, un hombre que luchó en la Resistencia francesa contra los nazis y que encuentra en el Líbano un nuevo y destructor conflicto.

En 1999 publicó Identidades asesinas, otro ensayo, en el que denuncia la locura que incita a matar en nombre de una lengua, etnia o religión.

Con su siguiente novela, El viaje de Baldassare (2000), volvió a situar al protagonista en una encrucijada de culturas y experiencias que le lleva desde el Líbano hasta el Londres de 1666 a través de un camino marcado por la incertidumbre de un apocalipsis anunciado por todas las confesiones.

Su última estancia en España fue en septiembre de 2009, con motivo de la publicación de su último título, El desajuste del mundo. Cuando nuestras civilizaciones se agotan.

El autor, cuya obra ha sido traducida a varios idiomas, ha realizado además una incursión en el mundo de la ópera como autor del libreto Lamour de loin (El amor de lejos), con música de la finlandesa Kaija Saariahao, en el Festival de Salzburgo en agosto de 2000.

Entre otros premios, cuenta con el Premio Maison de la Presse en 1988 por Samarkanda; el ya citado Goncourt, la medalla de Oro de Andalucía 1994, o el Premio del Grupo Compostela – Xunta 2009.

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