El relator de la ONU para los pueblos indígenas acusa a los Estados

Considera que el desafío es lograr que apliquen las legislaciones que ellos mismos han aprobado

Deia, efe, 14-05-2010

bilbao. El relator especial de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, Stephen James Anaya, afirmó ayer que en la actualidad se enfrentan al “desafío” de conseguir que los Estados de América Latina que han aprobado normas a favor de los derechos de los indígenas las apliquen en la práctica. Según explicó en una entrevista, los Estados han aprobado la Declaración de los Derechos Indígenas, que recoge los derechos a la libre autodeterminación y a la autonomía, con lo que “se supone que tienen voluntad de aplicarlo”, según dijo, aunque añadió que “en la práctica no lo hacen”.

James Anaya participó ayer en Bilbao en la primera sesión del congreso internacional La plasmación política de la diversidad, autonomía y participación política de los pueblos indígenas en América Latina, que ha organizado el Instituto de Derechos Humanos Pedro Arrupe de la Universidad de Deusto con motivo del décimo aniversario de su programa de formación de líderes indígenas.

El también catedrático de Derechos Humanos de la Universidad de Arizona explicó que el “obstáculo” fundamental para lograr el reconocimiento práctico de los derechos de los indígenas hay que buscarlo en “toda una historia de discriminación racial, que considera inferiores todos los patrones culturales, políticos e institucionales de los pueblos indígenas”.

Por ello, la actual reivindicación de la autonomía de estos pueblos hay que plantearla desde “un enfoque internacional, que más que presionar a los Estados busque su cooperación”, ya que promover esa autonomía también sirve para “fortalecer” los sistemas democráticos de los que se excluye en una mayoría de ocasiones a los pueblos indígenas. El relator especial de la ONU ha resaltado la importancia de concienciar a la sociedad “mundial” ante este problema porque “vivimos en un mundo y una economía globalizada que tiene relevancia en la vida de los pueblos indígenas” y ha destacado la necesidad de “promover otro modelo de desarrollo, porque los que existen no solo no tienen en cuenta a los indígenas, sino que pasan por encima de ellos”. “Estamos hablando – dijo – de patrones institucionales, políticos y culturales que han funcionado para perpetuar la situación de opresión”, señaló.

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