La familia Sucuzhañay lamenta fallo de jurado

El Universo, 08-05-2010

Julia Quintuña, madre del ecuatoriano José Sucuzhañay, quien murió después de una agresión por parte de dos afroamericanos el 7 de diciembre del 2008, lamentó ayer el fallo de un jurado en Nueva York que determinó que uno de los agresores fue culpable de homicidio no agravado, pero se salvó de ser convicto de un crimen de intolerancia racial.

Quintuña también lamentó que las versiones de los agresores de su hijo, Hakim Scott y Keith Phoenix, quienes lo golpearon con una botella y un bate hasta dejarlo inconsciente, lo que luego de cinco días provocó su muerte, fuesen aceptadas por el jurado como una pelea de pandillas.

Scott fue acusado de atacar a Sucuzhañay, en una calle de Brooklyn, con una botella de cerveza. El inmigrante fue agredido cuando caminaba tomado del brazo con su hermano. El agresor, de 36 años, persiguió a Rommel, el hermano de la víctima, amenazándolo con la botella rota. Los fiscales dicen que Scott y Keith Phoenix creyeron que los hermanos eran homosexuales y los insultaron.

“Mi hijo Rommel, quien iba abrazado con José, logró escapar del ataque y testigos que presentaron su testimonio demostraron que mientras recibían los golpes, estos dos hombres inhumanos les insultaban por ser latinos y porque creían que eran homosexuales”, dijo Quintuña, intentando contener el llanto.

Por eso la angustiada madre pidió apoyo a las autoridades ecuatorianas para que vigilen el proceso y que la sentencia en contra de los acusados, que se dictará el 9 de junio, deje un precedente que evite más injusticias contra los inmigrantes en Estados Unidos.

También Quintuña pidió ayuda para que la Embajada de Estados Unidos en Ecuador le asigne una visa que le permita viajar y estar presente cuando se dicte sentencia. “Quiero ver las caras de estas personas malas que no les importó que José era padre de dos niños y que ahora están a mi cargo”, dijo.

Juan Sucuzhañay, el menor de los nueve hijos de Quintuña, dijo que en el Ecuador se deben emprender acciones de protesta, lideradas por los organismos encargados de migración, y no descartó una marcha en Cuenca para reclamar justicia.

El jurado en Brooklyn concedió la razón al abogado de Scott, quien afirmó que la agresión no constituyó un caso de crimen de intolerancia racial. Scott enfrenta una posible pena de 25 años por homicidio involuntario y de 5 a 15 años por tentativa de asesinato contra Rommel.

Diego Sucuzhañay, otro hermano de José, dijo que no entiende por qué el jurado no halló culpable a Scott de un delito de intolerancia racial. “Había muchas pruebas y testimonios de que ellos usaron ciertas palabras cuando estaban atacando a nuestros hermanos”, dijo.

Jorge López Amaya, cónsul general de Ecuador, señaló que esperaría para hablar hasta el segundo veredicto, pero elogió el trabajo de los fiscales. Phoenix se declaró inocente y otro jurado entró en receso el jueves sobre su caso. Las deliberaciones continuaron ayer.

Julia Quintuña
MADRE DE LA VÍCTIMA
“Testigos demostraron que les insultaban por ser latinos y porque creían que eran homosexuales”.

Diego Sucuzhañay
HERMANO DE LA VÍCTIMA
“Había muchas pruebas de que ellos usaron ciertas palabras cuando los atacaban”.

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