Con «hiyab» azul, gafas  de sol y abrazada a sus padres, la chica fue recibida por la directora del IES Gerardo Diego.

MADRID – Ayer miércoles, sí. Najwa Malha, la joven expulsada de su instituto de Pozuelo de Alarcón por vestir durante las clases el velo islámico, volvió ayer a retomar su formación académica. El pasado lunes su madre solicitó la baja en el centro educativo en que el había cursado todo el ciclo de la ESO hasta ahora, el IES Camilo José Cela, porque su reglamento interno impedía que la chica de 16 años siguiera la lección con el pañuelo islámico sobre su cabeza.  A partir de ese momento Najwa pasó a ser alumna del instituto Gerardo Diego, de la misma localidad madrileña y que sí acepta que sus escolares vistan el «hiyab».
La última palabra
Con un día de retraso provocado –según su padre– por el «cansancio y presión» sufrido por la adolescente en los últimos días, ayer  volvió de nuevo a las aulas. «La última palabra ha sido de ella», declaró Mohamed tras acompañar a su hija hasta su nuevo instituto. Najwa entró en el centro con un pañuelo azul, gafas de sol y abrazada por sus progenitores. En la puerta le esperaba la directora, quien se interesó por la situación de su nueva alumna de cara a la recta final del curso. «Está perfectamente bien, muy contenta y sobre todo con la ilusión de incorporarse cuanto antes a sus estudios», insistió Mohamed a los periodistas que se agolpaban a las puertas del IES Gerardo Diego.
Esta mañana padres e hija se reunirán con su abogado, Iván Jiménez Aybar, que se va a encargar de la denuncia contra el primer instituto de Najwa. Alegarán que el centro no respetó su libertad religiosa al apartarla de las clases por su «hiyab».
El caso de Najwa está zanjado. Ha retomado la normalidad y por este motivo se ha cancelado un sermón previsto para mañana viernes en las mezquitas islámicas de todo el país. Estaba previsto que los imanes unificaran su mensaje sobre el uso del pañuelo musulmán.

Una ausencia de 15 días
Ayer teminaron para Najwa Malha sus días apartada de los pupitres. Su historia comenzó el 7 de abril cuando su instituto, el Camilo José Cela, en el que ha cursado toda la ESO, la sacó de las clases ante su negativa a asistir a ellas sin su «hiyab». Hasta su reincorporación la alumna ha pasado cinco días lectivos sin acudir a ningun centro educativo, el lunes asistió por última vez con sus antiguos compañeros a una excursión al Madrid de Galdós. El artículo 32 del reglamento de regimen interno de su ya ex instituto prohibía utilizar el pañuelo en las aulas. Finalmente, el Consejo Escolar decidió no hacer una excepción con Najwa y ella se ha inscrito en un nuevo centro educativo  que sí permite a sus alumnos el uso de velo sobre el cabello.