El alcalde californiano prohíbe los viajes oficiales al Estado

San Francisco decreta el «aislamiento» de Arizona

La Razón, 30-04-2010

Gavin Newson lidera la campaña contra la polémica ley de inmigración del Estado fronterizo.

Nueva York – Hace unas semanas Raúl Soto, de la organización Red Fronteriza en El Paso (Texas), explicó en una de las reuniones de su asociación de inmigrantes que «hay que trabajar muy duro todavía por la reforma migratoria» con la que sacar de las sombras a los casi trece millones de indocumentados de EE UU. Fue la manera más diplomática que encontró para admitir sus dudas sobre que la administración Obama abordase esta cuestión este año. Pero la controvertida ley contra la inmigración ilegal eleva el debate a la agenda nacional e internacional.
Así las cosas, la ciudad de San Francisco ha anunciado sanciones contra dicho Estado. Su alcalde, Gavin Newsom, decretó ayer una moratoria a los viajes oficiales de los funcionarios de la ciudad californiana a Arizona, excepto aquellos relacionados con el Departamento de Sanidad o Seguridad. También ha pedido una revisión de todos los acuerdos de su urbe con el mismo Estado y ha solicitado a los residentes de San Francisco que eviten visitar dicho lugar o comprar productos y utilizar servicios que procedan de Arizona. «La gente de San Francisco tiene que dejar claro que no tolerará leyes discriminatorias», explicó David Campos, del Ayuntamiento de San Francisco.
Esta propuesta, rubricada la semana pasada por la gobernadora republicana Jan Brewer, convierte en criminales a los «sin papeles» y obliga a los policías a detener a cualquier persona «sospechosa» de no tener sus documentos en regla. David Campos, que llegó a EE UU a los 14 años, admitió que «no estamos en contra de los ciudadanos de Arizona, es una medida contra las autoridades».
Líderes demócratas del Congreso presionaron ayer al presidente, Barack Obama para que presente una demanda en contra de la ley y promueva una reforma migratoria integral este año. Desde el Capitolio, los legisladores de Estados con alta concentración de inmigrantes condenaron la legislación de Arizona. «Estamos pidiendo de forma colectiva que el presidente, a través del Departamento de Justicia y su fiscal general, se sume a la batalla legal para bloquear» esa ley, explicó el congresista Raúl Grijalva.
Obama ya ha reconocido que «ésta no es la forma correcta [de abordar la cuestión migratoria]», mientras que el fiscal general del Estado, Eric Holder, tildó de «de – safortunada» la norma.
Por su parte, Phil Gordon, alcalde de Phoenix, la capital de Arizona, anunció que presentará a título personal una demanda contra la misma ley.
Según el diario «The Houston Chronicle», la legisladora estatal republicana de Texas Debbie Riddle presentará en este Estado, en enero próximo, una ley similar a la de Arizona.
Al otro lado de la frontera, el Gobierno mexicano ha emitido una alerta de viaje para aquellos que visiten, residan o estudien en el mismo Estado, donde hay alrededor de 460.000 personas en situación ilegal. Aeroméxico canceló 40 vuelos a Arizona debido  las miles de anulaciones de viajes de los pasajeros mexicanos. Los inmigrantes irregulares todavía no han alzado su voz. Tienen previsto salir de las sombras pasado mañana para manifestarse y empezar su pulso contra las autoridades.

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