Tres niñas del Camilo José Cela acuden a clase con velo. El instituto denuncia que han sido presionadas por sus padres

Comienza la revolución del «hiyab»

La Razón, 20-04-2010

A las tres jóvenes, se unieron otras dos que se cubrieron la cabeza con capuchas en señal de apoyo a Najwa Malha.

MADRID – Nawja Malha no está sola. La lucha de esta estudiante española y musulmana, de 16 años, porque su instituto, el  Camilo José Cela de Pozuelo, la deje llevar velo en clase empieza a ganar adeptos. Así lo quisieron dejar claro ayer cinco de sus compañeras que acudieron al centro con la cabeza cubierta con el «hiyab» islámico, tres de ellas, y las otras dos, con capuchas.

Las tres jóvenes españolas de origen musulmán, de Tercero de la E.S.O que acudieron con el «hiyab» se presentaron ayer junto a las otras dos chicas en el Camilo José Cela para apoyar a su compañera Najwa a la que el centro mantuvo durante veinte días apartada de sus compañeros por llevar velo e incumplir así  el artículo 32 de su Reglamento de Régimen Interior que prohibe llevar gorras o cualquier prenda que cubra la cabeza en el interior de las instalaciones. ¿Un gesto de solidaridad o de presión?

El guiño de las cinco amigas de Najwa ha abierto el debate sobre  la libertad de las mujeres musulmanas para cubrirse o no la cabeza. Y es que por parte del Camilo José Cela se denunció ayer que las jóvenes reconocieron al instituto que  portaban el velo porque sus padres se lo habían pedido y que si las normas del instituto no cambian se lo quitarían sin problema.

El Camilo José Cela subrayó ayer, además, que el gesto de las cinco compañeras de Najwa llegó precisamente un día antes de que el centro decida si modifica su reglamento interno o, por el contrario, mantiene la prohibición y con ello la imposibilidad de que la niña continúe estudiando en este instituto. Y es que, Najwa ya ha anunciado que no renunciará a llevar el «hiyab», porque afirmó «es un acto de sumisión a mi Dios»; una declaración que, si no cambia nada en el Camilo José Cela, obligaría a la Consejería de Educación a buscar otro centro para Najwa.


Un nuevo instituto
La posición de la Comunidad de Madrid en este tipo de casos siempre ha sido la misma. Su departamento de Educación, que dirige Lucía Figar, ha declarado que respeta la independencia de los  centros, tal y como queda reflejada en el Decreto de Convivencia   elaborado por la Comunidad y en la Ley Orgánica de Educación que determina que «los Centros dispondrán de autonomía pedagógica, de organización y de gestión en el marco de la legislación vigente, siguiendo un modelo participativo en su gestión».

De cualquier modo, la Consejería de Educación, para la que la escolarización de los menores explicó que es prioritaria, se comprometió, en el caso de que no se llegue a un acuerdo entre el instituto y las alumnas afectadas por la regla, a buscar un nuevo Instituto de Secundaria «de forma inmediata» que no prohiba el «hiyab».
 
Precisamente hoy será el día en el que el Consejo Escolar del Camilo José Cela (del que forman parte la Dirección, el claustro de profesores y una representación de los padres de los alumnos) se reunirá  para decidir el futuro de la norma que prohibe a Najwa acudir con velo y por tanto el de la propia  joven. Para la Consejería de Educación, el hecho de que un día antes de que se reúna el Consejo coincida con que el centro denuncie que las niñas fueron instadas por sus padres a llevar el velo en apoyo a Najwa, sería «una medida de presión inaceptable».

Las cinco jóvenes con la cabeza cubierta pudieron entrar ayer a clase a las 8:20 horas, pero, según denunció el padre de una de ellas, tras el recreo, sobre las 11.30 horas, las tres chicas que llevaban «hiyab» (las otras dos sólo se puso una capucha) fueron   apartadas y llevadas a una sala de espera, como sucedió con Najwa durante veinte días. Según afirmó este padre a la agencia Europa Press, «el IES recriminó a las niñas que sólo estaban buscando problemas» al tiempo que defendió que su hija y otras dos niñas (hermanas) «están en su derecho» de hacer lo que quieran y que  «tienen el deber de llevarlo porque son musulmanas».


Una falta leve
Sin embargo, este padre apuntó que desde el instituto no se les permitió la vuelta a clase y que incluso les dieron un apercibimiento, explicándoles lo sucedido. Y es que, según el Reglamento de Régimen Interior del centro, infringir el artículo 32, que prohibe llevar la cabeza cubierta, es una falta leve que conlleva: «La amonestación verbal o por escrito que  deberán ser devueltas al profesor tutor tras ser firmadas por los padres o tutores del alumno» o «la expulsión de la sesión de clase con comparecencia inmediata ante el jefe de estudios o el director, la privación del tiempo de recreo o cualquier otra medida similar de aplicación inmediata», entre otras sanciones.

Sin embargo, los padres de las jóvenes amonestadas ayer afirmaron que acompañarán hoy (día de la votación del Consejo Escolar) a las estudiantes para pedir explicaciones al Camilo José Cela y para ver qué ocurre con sus casos.


Apoyo desde las redes sociales
«Apoya a Najwa Malha», solicita desde la red social Facebook un grupo que al cierre de esta edición contaba con 182 miembros. Tras la salida a la luz del caso de la joven del instituto Camilo José Cela, muchos han sido los ciudadanos que han querido prestar su ayuda para conseguir que su centro escolar acepte el velo musulmán de Nawja. «Es una verguenza ver que hasta los centros educativos adoptan medidas como esas y contra una chica de 16 años que lo unico que lleva es una pequeña prenda sobre su cabeza como simbolo de su religion», relata Dunia, una de las seguidoras de este grupo. Como medida de presión hacia el centro educativo, los participantes en «Apoya a Najwa Malha» ofrecen la dirección de correo electrónico del instituto para que se remitan allí las quejas.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)