El acusado de crimen de Lucero culpa a un amigo

El Universo, 09-04-2010

El joven Jeffrey Conroy, acusado de la muerte del ecuatoriano Marcelo Lucero, aseguró ayer en el juicio que fue uno de sus amigos, Christopher Overton, de 17 años, quien asesinó al inmigrante de una puñalada en el pecho.

Conroy, de 18 años, se sentó ayer en la silla de los testigos luego de que el juez Robert Doyle, que en principio se había negado, aceptara una petición del abogado de la defensa, William Keahon, para que su cliente declarara.

Según Conroy, él confesó inicialmente que lo hizo porque Overton tiene antecedentes criminales. Un detective del caso que había interrogado a Conroy aseguró el lunes que este había confesado ser el autor del crimen.

Inmediatamente después de que Conroy prestara su testimonio, la asistente del fiscal pidió hablar en privado con el juez Doyle y el abogado de la defensa, William Keahon. Al volver a la sala, Doyle instruyó al jurado de no tener en cuenta la alegación de Conroy de culpar a Overton sino simplemente constar el “estado mental” del acusado en el momento del apuñalamiento.

Cuando Conroy subió al estrado se hallaban en la sala de audiencias los familiares de la víctima, entre ellos, su madre Rosario Lucero y su hermana Isabel, quienes llegaron a EE.UU. para seguir de cerca el juicio.

Chris Overton, de 18 años, se ha declarado culpable de asalto en pandilla y otros cargos con la gravedad del odio racial que terminó con la vida de Lucero, mientras Conroy afronta acusaciones de asesinato en segundo grado y homicidio en primer grado, aunque se ha declarado inocente.

El abogado de Overton, Pablo Gianelli, dijo a los periodistas que “Conroy debe estar muy desesperado en este momento. Culpar a mi cliente es solo una táctica angustiosa para quien ha sido señalado por todos como el autor de la puñalada que causó la muerte de Lucero”.

En su declaración poco después de los hechos, Overton dijo que tres chicos de su grupo estaban frente a Lucero, pero que él salió corriendo.

“Vi mucha sangre en la parte delantera de la camisa de la víctima y me asusté. Mientras caminábamos hacia el coche, uno de los muchachos dijo que Jeff había apuñalado al hispano y que estaba enjuagando el cuchillo en un charco”, agregó.

Marcelo Lucero, según los testimonios, fue cercado el 8 de noviembre del 2008 por siete jóvenes que lo insultaron con epítetos racistas, lo agredieron y luego uno de ellos, Jeffrey Conroy, le asestó una puñalada que acabó con su vida.

Ángel Loja, el amigo que acompañaba a Lucero el día de su muerte, figuró entre los testigos de la fiscalía y narró cómo siete jóvenes, entre estos Conroy y Hausch, les agredieron, pero admitió que no vio a Conroy apuñalar a Lucero.

El ecuatoriano caminaba con Loja cerca de una estación de trenes, cuando fueron confrontados. El ataque fue la culminación de una campaña de violencia de los adolescentes contra hispanos, según los fiscales.

Los siete jóvenes fueron detenidos y acusados en relación con la muerte de Lucero. Cuatro de ellos, que entonces eran menores de edad, se declararon culpables de los cargos de asalto de pandilla con motivo de odio racial y otros relacionados con otras agresiones y asaltos a latinos en Long Island.

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