Tampoco quiero polemizar con don Miguel de Legarra; por mi parte, doy por finalizado este debate con estas líneas. Me alegro de que estemos de acuerdo en que Gipuzkoa perteneció al Reino de Navarra hasta el año 1200. Teniendo en cuenta que el Reino de Pamplona, luego Navarra, fue fundado en el 824, resulta que Gipuzkoa perteneció a él casi cuatro siglos. Hallándose en peligro de muerte Alfonso VIII, el 8 de diciembre de 1204 manda redactar un testamento en el que el Rey castellano dice: «Prometo, si Dios me diera salud, restituir al Rey de Navarra todo lo que tengo, desde el puente de Araniello hasta Fuenterrabía…». El rey sanó y olvidó cumplir su juramento. Esto dice la historia.
Si izar la bandera española en lugar preferente de la Diputación es una orden del Supremo, ¿a qué está esperando ese mismo Tribunal para ordenar que esa misma bandera sea izada en lo más alto del Peñon de Gibraltar, si para todo nacionalista español Gibraltar es España?
Carta a Mohamed
Mohamed es un africano de mi barrio. Negro de patera, largo de huesos y señorial. Me contó, con la serenidad del desierto de los tuaregs, que su mujer había muerto. Preciosa. Que estaba sin trabajo y que sus hijos estaban muy guapos. Tomamos tres tes. El primero amargo como la muerte, el segundo fuerte como la vida y el tercero dulce como el amor. Yo, a bote pronto, le canté unos versos de memoria: ‘Mi vida limita al norte con la muerte. Al sur con mi madre herida. A la derecha mi amo, contabilizando el hambre. Y a la izquierda tu sonrisa, amiga de amar amante’. Mohamed lloró, me besó y me abrazó. Mohamed acaricia con las manos y con la mirada cuando habla. Mohamed es mi amigo. ‘Salah Malekum’, Mohamed. Agur bero bat.