El Gobierno español decidió dar otra “vuelta de tuerca” en su afán de deshacerse de inmigrantes y prepara ayudas económicas de hasta 2.600 euros (3.640 dólares) por familia, más el pago del pasaje, para los extranjeros que dejen España.

Así lo reveló ayer el diario Expansión, que explica que el programa del 2010 se dirige a personas extranjeras “especialmente vulnerables” (en situación de carencia; menores, embarazadas, etcétera) y a extracomunitarios (de fuera de la Unión Europea) pendientes de una solicitud de asilo o que se hallen “en situación irregular”.

La medida, que el Partido Popular la bautizó como “cheque inmigrante”, es independiente al programa de Retorno Voluntario instaurado en noviembre del 2008, y que no ha tenido los resultados esperados.

En el lapso de un año, 8.724 extranjeros se inscribieron en el programa de Retorno Voluntario, de los cuales, 44% procede de Ecuador. Este plan está diseñado para que aquellos trabajadores extracomunitarios (de fuera de la Unión Comunitaria) que se encuentren en situación de desempleo puedan percibir su prestación contributiva a través del abono acumulado de la misma. Además, ya no pueden volver a España, al menos en un plazo de tres años.

Respecto a la nueva medida, Alfredo Cedeño, presidente de la Federación de Entidades Ecuatorianas en Cataluña, explicó que tampoco tendrá una gran aceptación por parte de los extranjeros, a pesar de ser los que más sienten los rigores del desempleo. “Hay muchos ecuatorianos en situación crítica, pero no creo que deseen volver, porque no saben qué se encontrarán en Ecuador”, dijo.

Orlando Murillo, presidente de la Asociación de Ecuatorianos en San Feliú de Llobregat, a 11 kilómetros de Barcelona, consideró que ninguno de sus compatriotas quiere perder sus documentos de residencia, por lo que prefieren no apuntarse a ningún plan.

“Yo sé que hay gente que está volviendo pero sin inscribirse en ningún plan, porque no saben qué suerte correrán en Ecuador. Así, si las cosas van mal, tienen toda la libertad para regresar”, sentenció.

Cedeño además puntualizó que no es tan fácil retornar a Ecuador. “Muchos tienen hijos adolescentes que aún estudian, que han crecido aquí y que se sienten parte de aquí. De manera que es difícil volver”.

Según el Ministerio de Trabajo, 440.304 ecuatorianos residen legalmente en España.