Los centros destinados por cada isla para acoger menores extranjeros no acompañados, gestionados directamente por los cabildos, tienen ahora mismo 29 plazas libres, algo ilógico cuando todavía siguen abiertos seis recintos de emergencia creados por el Gobierno canario, precisamente porque los primeros se encontraban por encima de su capacidad y no podían albergar a más jóvenes que llegaban en pateras o cayucos.

El acuerdo al que llegaron Gobierno y cabildos, refrendado por el Parlamento canario el 11 de febrero de 2009, fijaba que en el Archipiélago podrían vivir unos 250 menores extranjeros, tutelados por la Consejería de Bienestar Social del Ejecutivo canario, que cedía la gestión a los cabildos, como sucede con los menores nacionales.

El propio Gobierno ha manifestado también que el número idóneo para el Archipiélago podría situarse en 300. Independientemente del número exacto, lo más curioso es que queden plazas libres en esos recintos mientras en los de emergencia conviven en números muy elevados.

Por el citado acuerdo, cada cabildo se comprometía a atender a un determinado número de niños extranjeros, en proporción a la población de la Isla.

De esta forma, a Gran Canaria le corresponden 82, a Tenerife 75, a Lanzarote 27, a Fuerteventura 24, a La Palma 22, a La Gomera 16 y a El Hierro, 4.

Salvo en Lanzarote, que tiene ocupadas las 27 plazas, que fueron adjudicadas a esta isla, en las seis restantes hay vacantes.

De acuerdo con los datos recabados por este periódico, en Gran Canaria quedan 10 plazas libres, debido a que tiene una ocupación del 87%; en Tenerife quedan 5 sin emplear y se alcanza un nivel de ocupación del 93%; Fuerteventura registra siete vacantes y se encuentra al 70%; La Palma sólo tiene una plaza libre (95%): en La Gomera son dos las que faltan por ocupar (87%) y El Hierro tiene sus cuatro plazas libres (100%).

Datos puntuales

Los cabildos informan puntualmente a la Consejería de Bienestar Social sobre los movimientos que se producen en sus centros de menores y el Gobierno se encarga de buscar a los menores más adecuados para vivir en esos recintos.

Con objeto de conocer la versión de las corporaciones insulares, este periódico intentó contactar ayer con el presidente de la Federación de Cabildos Insulares (Fecai), Pedro San Ginés, lo cual no fue posible.

En los centros de emergencia abiertos por el Gobierno canario en 2006 todavía viven 272 niños africanos en espera de un hogar más pequeño. Estas infraestructuras se pusieron en funcionamiento como un medio puntual y de urgencia para albergar a los menores que llegaban de forma continua en cayuco. No obstante, el Gobierno considera que lo ideal es que los chicos puedan desarrollar su vida en hogares, como mucho de 12 plazas, en lugar de permanecer en grandes recintos.

De emergencia

Por ejemplo, en el dispositivo de emergencia de Agüimes (Gran Canaria) todavía están 52 menores extranjeros y en el otro de la misma isla, El Salto del Negro, otros 17. En la isla de Tenerife son otros cuatro los dispositivos de emergencia que siguen operativos, uno en Tegueste, ocupado por 64 jóvenes; el segundo en La Esperanza, donde viven 78 niños africanos; el tercero en Icod de Los Vinos, con 34 y el último, en Las Mercedes, con 27 plazas.

Además, el Gobierno canario tutela a otros 229 menores extranjeros que viven en la Península, gracias a un acuerdo entre Canarias y distintas ONG. Están repartidos por varias comunidades: Madrid, Salamanca, Segovia, León, Burgos, Valladolid, Murcia, Alicante, Toledo, Castellón, Badajoz, Cáceres, Valencia, Santander, Baleares, Palma de Mallorca, Murcia o Asturias.