Efectivos de la Ertzaintza y dos inspectores de trabajo acudieron a registrar ayer una lonja ubicada en la avenida del Cantábrico. ¿El motivo? Comprobar ‘in situ’ la situación administrativa de la empresa.

Y es que según informó ayer la Policía autonómica, dicha sociedad estaba siendo investigada por un posible delito contra los derechos de los trabajadores. Acertaron. Es más, cuando pasadas las nueve y veinte de la mañana de ayer, los agentes se personaron en el establecimiento comprobaron que seis empleados, cinco de nacionalidad india y uno paraguayo, se encontraban en Vitoria en situación irregular. «Estos no tenían ni el permiso de residencia ni contrato de trabajo», señalaron de Interior.

Por esta razón, la Ertzaintza, que acudió acompañaba de inspectores de trabajo, puso a disposición de Extranjería del Cuerpo Nacional de Policía a los seis trabajadores. Por su parte, los responsables del negocio se encuentran a la espera de la correspondiente citación judicial.

Viva al caer al río

Por otra parte, ayer se conoció el informe definitivo de la autopsia realizada a la agente policial de Logroño, Vanesa A.C., cuyo cadáver apareció el 15 de noviembre de 2009 en las aguas del Ebro, a su paso por la localidad alavesa de Baños. El documento constata que estaba viva cuando cayó al río y establece como causa más probable de su muerte la «inmersión vital». Dicho de otro modo, la joven fallecida murió – al parecer – ahogada, sin que pueda certificar el informe si fue ella misma quien se lanzó al agua o si la arrojó otra persona.

El informe detalla que la muerte se produjo entre el 3 y 8 de noviembre, pocos días después de la fecha en que debía incorporarse al trabajo tras unas vacaciones. Esto y los signos de violencia hallados en su domicilio de Lardero provocaron la detención de su ex marido, que siempre ha proclamado su inocencia.