«Casa». Los agentes de la Policía Municipal de Bilbao que detuvieron al sospechoso llamaron a ese número que aparecía en el móvil. Al otro lado les contestó el legítimo propietario del teléfono, que les indicó que acababa de sufrir un robo en su domicilio mientras dormía. Según las investigaciones de los agentes, el arrestado, identificado como H.S., de 20 años y origen magrebí, había asaltado el piso, ubicado en la calle García Salazar, y se había apoderado del móvil, de un reloj de alta gama y unos 100 euros en metálico. El dueño se despertó justo en el momento en que el intruso abandonaba la vivienda. Minutos después llamó a la Ertzaintza para denunciar el robo.
Cuando los policías comunicaron con él, éste describió los objetos que echaba en falta y que coincidían con los que le había decomisado al supuesto ladrón. Una patrulla le localizó en la calle Villarías alrededor de las cinco de la mañana. Al detectar su presencia, el joven intentó esconderse, lo que despertó las sospechas de los agentes, que le arrestaron. La semana pasada, la Ertzaintza detuvo a otros dos ‘silenciosos’ por una veintena de robos.