A. BAQUERO / J. ALBALAT / BARCELONA
D. PLACER / SANT FELIU DE LLOBREGAT

Una redada simultánea en siete ciudades del área metropolitana de Barcelona ha permitido a los Mossos d’Esquadra desmantelar una banda de hooligans que, nacida al calor de los Boixos Nois, se había convertido en una maquinaria de extorsión que estaba aterrorizando a numerosos propietarios de locales de ocio nocturno. Los Mossos han detenido a entre 15 y 20 personas, todas ellas miembros de la tribu casual, que es como se conoce a la rama más violenta de los Boixos Nois. Les acusan de tráfico de drogas, extorsión y asociación ilícita. El grupo había irrumpido en el negocio del narcotráfico, conseguía mercancía por la vía de asaltar a otros narcotraficantes y mantenía vínculos con mafias del este de Europa.
El golpe policial, a cargo de la Unitat Central de Segrestos i Extorsions de la Divisió d’Investigació Criminal, comenzó ayer a primera hora de la mañana con una quincena de entradas en domicilios, una tienda y un bar en Barcelona, L’Hospitalet, Gavà, Esparreguera, Castelldefels, Sant Feliu y Sant Boi.

LOS ÁNGELES DEL INFIERNO / Fuentes cercanas a la investigación, coordinada por el Juzgado de Instrucción número 3 de Gavà, explican que el grupo era una organización perfectamente jerarquizada, con un tipo de estructura similar a la banda de motoristas Ángeles del Infierno, y con dos tipos de integrantes: los casuals y los minicasuals. Los primeros supuestamente negociaban las extorsiones y dirigían las actividades, mientras que los segundos, mucho más jóvenes, actuaban como fuerza de choque causando violentos incidentes en discotecas y ejecutando palizas.
La policía autonómica espera que con la detención se disipe el clima de terror que estos individuos habían generado en la noche barcelonesa y que haya dueños de locales que quiebren la ley del silencio y se decidan a denunciar casos de extorsión.
El grupo se había introducido en el mercado de la droga, traficando sobre todo con cocaína, que en ocasiones obtenía atracando a otros narcotraficantes. Además, pretendía controlar ese negocio en los principales locales de ocio de Barcelona y su entorno. De hecho, en los registros, además de cocaína, los mossos se han incautado de una prensa de grandes dimensiones para empaquetar la droga, así como de diversas armas, entre ellas una pistola cargada y numerosos bates de béisbol.

AGRESIÓN EL SÁBADO / Uno de los cabecillas de la banda –según algunas fuentes, el jefe máximo– es Ricard Mateo, un destacado miembro de los casuals que en el 2003 ya fue detenido por secuestrar, junto a otros integrantes del grupo, a un marroquí vinculado a un narcotraficante. Mateo tiene antecedentes por robo con violencia, detención ilegal, resistencia a la autoridad, lesiones y tráfico de drogas.
Entre los arrestados hay al menos un componente del Bada-Bing, el club de fútbol varios de cuyos miembros fueron condenados por agredir a los jugadores latinoamericanos del equipo rival. Otro detenido fue investigado por las amenazas recibidas por el presidente del Barça, Joan Laporta, cuando este vetó la entrada al estadio del Camp Nou a los hinchas violentos. Este último es Antonio Torn, alias Antoñito, integrante también de la banda del secuestro y que fue detenido junto a su hermano en Esparreguera.
En esta localidad se realizó además un registro en el bar La Granada, que presuntamente era el punto de reunión de los casuals, a quienes se les acusa de todo un catálogo
de agresiones. La última la perpetraron el pasado sábado, cuando agredieron a un magrebí, causándole la rotura de la mandíbula.
En Sant Feliu de Llobregat fue detenido Enrique D., de 38 años. Su pasión por el Barça le había llevado a tatuarse un escudo del equipo. Enrique D., bajo y corpulento, trabajaba de gruista y era conocido por acumular gran cantidad de multas por aparcar mal su lujoso coche.

CONFUSIÓN VECINAL / Cuando la policía llegó al edificio donde vive Enrique D., los vecinos creyeron que los agentes iban a irrumpir en un piso conocido por ser un punto de venta de drogas. Pero el objetivo no era ese, sino el miembro de la banda de boixos nois extorsionadores.
El FC Barcelona se declaró ayer «satisfecho» por la operación policial.