En el municipio de Ribeira comenzó a trabajarse con el colectivo inmigrante en el año 2005 a través del Plan Comunitario y con ayuda de una subvención de la Secretaría Xeral de Inmigración. Actualmente, es la concejalía de Igualdade e Acción Social, dirigida por Esther Patiño, la que se encarga de ayudar a los recién llegados. De hecho, la diversidad cultural ribeirense ha motivado la puesta en marcha de programas de integración que están divididos en ejes.

La edila comentó ayer los campos de intervención: asesoramiento jurídico y social, empleo, educación cívica e intercultural, mujer y sensibilización. Esther Patiño señaló que una de las primeras recomendaciones que se hace a los ciudadanos procedentes de otros países es que deben empadronarse.

Patiño precisó que de proporcionar asesoramiento jurídico se encarga una empresa contratada por el Concello. Hasta la fecha, la compañía ejercía su labor en una oficina prestada por el Ayuntamiento y ubicada en los locales que la Administración local posee en la calle Colón. Sin embargo, la firma está buscando ahora un bajo para alquilar y atender a los usuarios en estas nuevas dependencias.

Trabajo

El denominado eje laboral tiene como objetivo lograr la incorporación de los inmigrantes al mercado de trabajo. A ellos se les ayuda a elaborar un currículo o cubrir una instancia de solicitud y se les proporciona información sobre ofertas existentes.

Otro aspecto en el que se hace especial hincapié es en la alfabetización, puesto que la mayoría de los recién llegados desconocen el idioma. La pedagoga encargada de los planes de inmigrantes señala que, en coordinación con el instituto Número Uno, se imparten desde hace tiempo clases de español y otras de inmersión cultural gallega.