El abogado Javier Galparsoro, defensos de F.B., ciudadano marroquí casado con una española al que la Policía impidió volver a España tras visitar a unos familiares en Francia, exigió ayer que se permita el regreso de su cliente, en cumplimiento de una orden emitida por un juzgado de San Sebastián el pasado 26 de enero.

El 21 de enero, su cliente, empadronado en Bilbao – carece de permiso de residencia – , fue detenido por el Cuerpo Nacional del Policía, que le impidió la entrada en territorio español al entender que era un inmigrante irregular. El ciudadano marroquí, de 34 años, fue enviado al Centro de Extranjeros de Hendaya (Francia), donde todavía permanece. Un auto del Juzgado de lo Contencioso número 2 de San Sebastián que ordenaba su readmisión en España el pasado 26 de enero impidió que fuese deportado a Marruecos.

El también presidente de CEAR – Euskadi no entiende por qué su defendido se encuentra aún recluido en Francia a pesar del auto del juzgado donostiarra, que suspendió la expulsión debido al “arraigo” del implicado en España.