JOSEP GISBERT – Barcelona
Mas celebra que Puigcercós admita que el tripartito “está caducado” y elude hablar de pactos futuros

La presencia del alcalde de Vic en la candidatura de Artur Mas a las elecciones catalanas será, más allá de la valía de Josep Maria Vila d´Abadal, la evidencia de la importancia que CiU quiere conceder al debate de la inmigración. Y de la línea que tiene intención de seguir, “desde la decisión y la valentía”, para hacer frente a un problema que considera tan delicado como impopular. Josep Antoni Duran Lleida lo deja meridianamente claro en su semanal carta web, en la que llama a no cerrar en falso el debate abierto a raíz justamente de la acción del Ayuntamiento de Vic, al que agradece “haber osado plantearlo”.

El líder de UDC – el partido del alcalde de Vic-reivindica “el derecho e incluso el deber” de “hablar en voz alta, pero serena y respetuosamente, sobre el problema de la inmigración desde posiciones democráticas”. Y avisa de que “si desde posiciones democráticas no hablamos de la inmigración y de los problemas que comporta la ilegal, otros desde posiciones no democráticas lo harán y lo aprovecharán en sentido muy negativo”, en alusión, aunque sin citarlas explícitamente, a plataformas xenófobas. La conclusión a la que llega es que, después de la intensa polémica suscitada las últimas semanas, el debate no puede darse ni mucho menos por finalizado, porque, de hacerlo, “nos equivocaríamos”.

La inmigración se presume, pues, como uno de los elementos de la campaña catalana, en la que las calculadoras en busca de pactos que sumen mayoría prometen echar humo. Máxime después de que Joan Puigcercós haya formalizado la ruptura entre ERC e ICV, y haya descartado, por tanto, un tercer tripartito, y haya apostado por una alianza de futuro con CiU y PSC. Artur Mas hizo ayer oídos sordos al globo sonda de su contrincante, con el argumento de que CiU aspira a conseguir un gobierno fuerte, “sin muletas ni hipotecas”, y de que, en consecuencia, el objetivo es no hablar de pactos hasta después de las elecciones. Si acaso, al líder de CiU – de visita en diversas localidades del Vallès Occidental-la posición del candidato de ERC le sirvió para reforzar su convencimiento de que el tripartito “está caducado”: “Ni los mismos que lo hicieron lo defienden”, se regodeó irónico.