Concejales de España 2000 presentan mociones para vetar a los ‘sin papeles’ Valencia / Castellón

La decisión del Ayuntamiento de Vic de no empadronar a los inmigrantes sin papeles ha inspirado a los dos únicos concejales que la ultraderecha tiene en la Comunidad Valenciana, que tienen intención de copiar, en los próximos días, la idea original. Así, España 2000, una formación que se autodefine «defensora del patriotismo social», ha dado orden a sus ediles en Onda (Castellón) y Silla (Valencia) para que presenten mociones en sus respectivos ayuntamientos con la intención de pedir que «no se empadrone a los inmigrantes irregulares».

Con esta medida pretenden «poner fin a la enloquecida política de inmigración del Gobierno socialista» y adoptar las medidas «para contener en sus pueblos la llegada insostenible de inmigrantes irregulares».

La Junta Nacional del partido ultra imita el desafío del Consistorio catalán – gobernado por CiU, PSC y ERC – y esgrime un mismo argumento legal para exigir más requisitos a la hora de empadronar a los extranjeros. Según esta formación, el INE demanda para estar en el padrón presentar un DNI «o, tratándose de extranjeros, documento que le sustituye», que para ellos no puede ser otro que la tarjeta de residencia. Así lo defenderán sus ediles de Silla, Andrés Vicent, y Onda, María Isabel Ruiz.

No obstante, su propuesta será desestimada, puesto que los grupos mayoritarios en ambos municipios no están dispuestos a imitar la posición del Ayuntamiento de Vic, que ha despertado los recelos del Gobierno.

En Onda, tanto el PSOE, que gobierna en coalición con los independientes de AMI y los nacionalistas del Bloc, como el PP han dejado claro que la medida es «ilegal» y que no tienen intención alguna de respaldarla. El Gobierno local asegura que el proceso de empadronamiento que se lleva a cabo cumple con la legalidad y que no quiere endurecerlo. Pese a ello, pedirán un informe jurídico a los técnicos municipales para poner negro sobre blanco que la moción de la concejal de España 2000 no se ajusta a la normativa vigente.

Tampoco los populares tienen intención de dar cobijo a la propuesta de la ultraderecha en la localidad castellonense. Su portavoz municipal, Salvador Aguilella, afirma que «hay que cumplir la Ley de Extranjería y la de Régimen Local, por lo que el PP de Onda no puede apoyar una iniciativa que va en contra de la norma».

Muy contundente se mostró también el alcalde de Silla, el socialista Francesc Baixauli, que señaló que su equipo de gobierno tiene «muy claro que no se aceptarán propuestas de grupos neofascistas que intentan generar odio entre los vecinos de la localidad». Para el primer edil, la moción que en los próximos días entrará en el Ayuntamiento «esconde un trasfondo racista y xenófobo que el pueblo de Silla rechaza de forma mayoritaria».

Por su parte, el conseller valenciano de Inmigración, Rafael Blasco, señaló que «cualquier negativa a empadronar a una persona, con independencia de su situación legal, la condenaría a no poder acceder a la sanidad, la educación y otros servicios sociales».

El Gobierno critica la decisión de Vic

>Los ‘pesos pesados’ del Gobierno criticaron ayer con dureza la medida del Ayuntamiento de Vic.

>Zapatero evitó hacer una valoración directa, pero advirtió de que «el Gobierno va a ser firme en el principio de integración» y consideró que una posición distinta tendrá «un corto alcance».

>De la Vega dijo que la medida está condenada al «fracaso», porque una comunidad se construye desde el respeto a los derechos y no desde la «exclusión».

>Rubalcaba afirmó que está «radicalmente en contra», porque «es un disparate negar la educación o la sanidad a los hijos».