Identidad nacional frente a islam

La Vanguardia, , 13-01-2010

LLUÍS URÍA – París. Corresponsal
¿Es el islam soluble en la identidad francesa? ¿Asimilable a la concepción laica y republicana de la sociedad arraigada en Francia? Estas son las preguntas que atraviesan hoy a la sociedad francesa, después de que el Gobierno pusiera en marcha, a finales del año pasado, un amplio debate en todo el país sobre la cuestión de la identidad nacional. Un tema caro al presidente Nicolas Sarkozy, y también uno de sus reclamos electorales preferidos, que no porque sí resurge de repente en vísperas de las elecciones regionales del próximo marzo.

Dos factores externos al debate han acabado centrando la discusión en el papel del islam y de los musulmanes en Francia. De un lado, la iniciativa parlamentaria de estudiar una eventual prohibición del uso del velo integral y la burka en la vía pública. De otra, la decisión suiza de prohibir la construcción de nuevos minaretes. La yuxtaposición de ambas polémicas ha viciado el debate de la identidad nacional, lo que ha hecho crecer las voces – incluso en el seno del partido gubernamental, la UMP-que piden poner fin a la aventurada iniciativa.

Con una proporción de extranjeros similar a la de España, pero una importante población inmigrante, sobre todo magrebí, de nacionalidad francesa, el principal problema es el de la cohesión social. Un problema que sólo puede agravarse si la comunidad musulmana se siente estigmatizada. En una tribuna conjunta, dos líderes de la comunidad musulmana y judía defendían esta semana el modelo republicano y laico, y llamaban a no confundir identidad nacional con identidad religiosa. Justamente lo que está pasando.

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