El de España es uno de los últimos gobiernos de izquierda en Europa; también, el país que gestó e impulsa la Alianza de Civilizaciones, que aboga por un eje entre Occidente y el mundo árabe y musulmán a través de soluciones no militares. Pero curiosamente es el país europeo que menos asilados políticos acoge. En el 2008, unas 4.500 personas solicitaron refugio en España, la cifra más baja desde 1989 y el 2% de las peticiones en la UE, según datos de la ONU. Cifras que reflejan un descenso del 41% en las solicitudes de asilo en España respecto al 2007. Unos datos más llamativos cuando se comparan con la tendencia en el resto de la UE, donde se registra un crecimiento medio de 12% de solicitudes. Las cifras del informe de Eurostat Asilo en la UE 2008 dibujan un mapa en el que España está a la cola europea en el ámbito de la protección internacional. El ranking de países con más refugiados en la UE está encabezado por Francia, que en el 2008 registró 41.800 peticiones de asilo; Gran Bretaña, con 30.500 solicitudes; Alemania, con 26.900; Suecia, 24.900; Grecia, 19.900; Bélgica, 15.900, y Holanda, 15.300. Según el Ministerio del Interior, el descenso de solicitudes en España se debe a que “los flujos de inmigración ilegal que se registraron en España son de tipo económico, más que político”. La Comisión Española de Ayuda al Refugiado señala que España, con Zapatero, “se ha convertido por sus políticas de extranjería en una fortaleza inexpugnable para quien necesita asilo”. / Violeta Manners Moura