«Muy decepcionada».  Así se quedó la activista después de oír a Exteriores tras dos semanas de ayuno.

MADRID – La reunión acabó sin acuerdo. El primer contacto cara a cara entre un enviado de Exteriores, el jefe del Gabinete del ministro, y la activista saharaui Aminatu Haidar tras catorce días de ayuno no tuvo éxito. Haidar, quien se mostró «profundamente decepcionada» por la propuesta del Gobierno, rechazó la ciudadanía española, tal y como adelantó la propia activista a este periódico el sábado.
A través de su abogada, Inés Miranda, la ex presa política dijo que no quiere «ser extranjera en su propia casa». La letrada dijo que «jamás esperaba que un Gobierno democrático donde el Estado de Derecho debe cumplirse pudiera actuar de esta manera».
La oferta enviada por Miguel Ángel Moratinos es la misma de toda la semana: la nacionalidad española, el estatuto de refugiada o la petición de un nuevo pasaporte a Marruecos. Aminatu también insiste en su postura, quiere volver a El Aaiún (capital del Sahara Occidental), de donde fue expulsada el día 14. Con o sin pasaporte.
Según la versión de la letrada, Haidar reiteró que entró en suelo español obligada por Rabat y «con la cooperación necesaria de España». También insistió en que los gobiernos español y marroquí han violado el pacto internacional de derechos civiles y políticos, por el que se prohíbe a todo Estado negar a un ciudadano la salida de su territorio siempre y cuando no esté incurso en alguna causa legal.
Tras el fracaso de Exteriores, que hoy tratará de reanudar el diálogo,  la   Plataforma de Solidaridad instó a la «inminente intervención» del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para intentar solucionar este conflicto y evitar que tenga un «trágico final». Zapatero declaró que espera encontrar pronto una solución a la «difícil situación» de Haidar y recordó que su Gobierno es el que más apoya al pueblo saharaui. La ayuda económica se ha multiplicado por seis desde 2003 y ronda los 9 millones de euros al año.
Haidar aguanta el tipo a duras penas. Lleva quince días sin ingerir alimento alguno, tan sólo bebe un litro y medio de agua con azúcar cada jornada. Durante la primera reunión (de hora y media) con Agustín Santos, mantenida por la mañana en la sala de crisis del aeropuerto de Lanzarote, Haidar sufrió un «desvanecimiento» y tuvo que ser atendida por el médico. Según fuentes próximas a Haidar, la reunión, que la dejó extenuada física y mentalmente, «le ha costado tres días de huelga de hambre».

Almodóvar teme por la vida de Aminatu
El director de cine Pedro Almodóvar dijo que teme por la vida de Haidar durante el concierto solidario que se celebró en el auditorio de Rivas – Vaciamadrid. Almodóvar añadió que le «aterra la idea de que esta mujer se esté inmolando» y que ha querido demostrarle a Haidar que no está sola, que es una heroína contemporánea, víctima de una mala política. Organizado por el actor Willy Toledo y el cantante de Macaco, el concierto reunió a cientos de personas que corearon gritos en defensa de la libertad del pueblo saharaui.