Desarticulan una red de chinos que falsificaba tarjetas de crédito

La Verdad, LA VERDAD, 18-10-2009

La Guardia Civil ha desarrollado en Murcia la Operación Muralla, que ha permitido desarticular un grupo delictivo dedicado a la falsificación de tarjetas de crédito y el uso fraudulento de las mismas y ha detenido a sus cuatro integrantes, todos de origen chino, como supuestos autores de los delitos de estafa, falsificación de documentos y usurpación de identidad civil, según informaron fuentes de la Delegación del Gobierno en un comunicado.

Entre los efectos intervenidos se encontraban 22 tarjetas falsificadas, seis pasaportes falsificados, tres equipos informáticos, una cámara fotográfica y dinero en efectivo de curso legal español y extranjero. Hasta el momento y a falta de analizar toda la documentación obtenida, la Guardia Civil presume que la red ha adquirido fraudulentamente más de 40.000 euros.

La investigación comenzó el pasado día 14, cuando agentes de la Benemérita sorprendieron in fraganti a uno de los integrantes intentando abonar una compra de material informático con una tarjeta y un pasaporte falsificados en una gran superficie comercial.

Fruto de las investigaciones practicadas, la Guardia Civil orientó sus líneas de actuación hacia un grupo compuesto por cuatro personas, con base establecida en un inmueble de Murcia, aunque los agentes tenían constancia de que la mayoría de su actividad se realizaba en Águilas.

Paralelamente a estas actuaciones, la Guardia Civil practicó, previa autorización judicial, la entrada y registro de la vivienda utilizada como base de operaciones, donde se incautó gran cantidad de documentación, documentos públicos falsificados, material informático, un elevado número de tarjetas de crédito falsificadas y material adquirido con las mismas.

Modus operandi

Este grupo, organizado y jerarquizado, iniciaba su actividad ilícita con el clonado de tarjetas de crédito de españoles, uno de ellos fallecido, sin que las mismas se percataran. Una vez que habían conseguido el copiado de las mismas, los integrantes de la red manipulaban las falsas tarjetas empleando nombres de propietarios chinos ficticios o usurpando la identidad de otros ajenos a la organización. También falsificaban pasaportes para acreditar la titularidad de los mismos.

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