Una familia colombiana residente en Reus (Tarragona) ha presentado una denuncia por haber recibido una paliza presuntamente a manos de varios agentes de los Mossos d´Esquadra la madrugada del pasado domingo en plena calle. Aseguran que todo comenzó porque la policía quiso identificar a uno de ellos y acabaron agrediéndole. Los Mossos sostienen que fue el chico quien comenzó a agredirles.
Según el abogado de la familia, Lorenzo Calero, el domingo de madrugada, hacia las 5:30, los denunciantes volvían de la zona de ocio del Puerto Deportivo de Tarragona tras celebrar un cumpleaños. En la plaza de los Carros, se encontraron con dos «mossos» que le pidieron la identificación a uno de ellos «sin motivo aparente». Más adelante, otra pareja de agentes le volvió a pedir que se identificase. «En ese momento se pusieron agresivos, cogieron al chico y le retorcieron el brazo poniéndole en el suelo». Según Calero, al poco rato llegaron cuatro dotaciones antidisturbios elevando la cifra de policías a 20. «Empezaron a pegar a todo el mundo», explicó el abogado. La pelea acabó con seis detenidos que han quedado en libertad provisional. «Uno es un menor de 15 años que lo trataron de forma violentísima», añadió el letrado, quien añade que «Tenemos identificados a algunos agentes». La denuncia acusa a los Mossos de un delito de lesiones, vejaciones, abuso de la autoridad y apropiación de algunos útiles ya que la familia asegura que les desaparecieron objetos personales, como una pulsera o un móvil.
Por su parte, fuentes de Mossos explicaron otra versión. Afirman que los agentes acudieron al lugar de los hechos porque tenían constancia que se había producido una pelea con un lesionado. Al llegar allí, un chico herido señaló a otro hombre como presunto autor de la pelea. Los Mossos, procedieron a identificarle pero «no colaboraba». La negativa del chico fue tal que comenzó a agredir a los agentes. Las demás personas de la familia se metieron en la pelea que acabó con los detenidos y con dos Mossos d´Esquadra heridos leves.