La Asociación SOS Racismo ha presentado una denuncia contra uno de los vigilantes de seguridad de la estación de Renfe de San Sebastián por agredir presuntamente a un joven negro que viajaba en un tren de la compañía. La integrante de SOS Racismo y testigo de la supuesta agresión, Carmen Martí, informó ayer de que los hechos ocurrieron el pasado miércoles en torno a las 20.45 horas cuando el interventor del tren de Renfe que cubre el trayecto Irun – Zumarraga pidió a un joven negro que viajaba en el convoy que le mostrara el billete, momento en que se inició una discusión entre ambos.

Según relató Martí, cuando el tren paró en San Sebastián cuatro vigilantes de seguridad de Renfe y Adif entraron al vagón en el que se encontraba el joven y lo sacaron por la fuerza, lo inmovilizaron en el suelo, le tiraron del pelo y lo «apalearon», mientras ella y otros pasajeros que se encontraban en el tren trataron de impedírselo y les pidieron que lo soltaran.

Fuentes de Renfe explicaron por su parte que el joven no había querido mostrar su billete al interventor después de acceder al tren en la parada de Ventas de Irun, y que también se negó a comprar uno en transcurso del trayecto, por lo que el revisor le indicó que debía abandonar el tren en el siguiente parada, a lo que también se negó.

Ante la respuesta del viajero, el interventor llamó a la estación de San Sebastián para avisar de que uno de los viajeros no poseía ningún billete con el fin de que fuera expulsado del vagón, y al llegar a la estación de la capital guipuzcoana el revisor detuvo el convoy hasta que los vigilantes sacaron al joven que «actuaba de forma violenta» y se resistía a salir.

Las mismas fuentes indicaron que tras el incidente, que retrasó el servicio unos ocho minutos, el convoy reemprendió el trayecto y añadieron que por el momento no tienen constancia de las denuncias presentadas.

Zarandeada

Carmen Martí, quien aseguró que también fue zarandeada por uno de los guardas de seguridad al que denunció por agresión, presentó al día siguiente dos denuncias en el Juzgado de Guardia de la capital guipuzcoana, una personal contra el vigilante que la «agarró de los brazos» y la «empujó» cuando ella les llamó la atención por su «respuesta desproporcionada», y otra en representación de SOS Racismo por agredir al joven negro.

Renfe aclaró por su parte que el interventor actuó correctamente y de acuerdo con el procedimiento habitual al solicitar al joven que abandonara el tren por no disponer de billete y apuntado que esta persona insultó al revisor y había sido descubierta en ocasiones anteriores cuando viajaba sin billete. Dijeron que los hechos no fueron «una cuestión de racismo».