Las captaban a través de un abogado e, incluso, les financiaban los viajes desde su país de origen, en este caso Paraguay. Una vez en España, las trasladaban a clubes de alterne de la provincia de Alicante donde las prostituían y, además, las obligaban a vender droga entre los clientes. La policía ha desarticulado a la red, que tenía su base en un prostíbulo de Orihuela, y ha arrestado a los cinco miembros de la trama, uno de ellos un funcionario de un juzgado que alertó al cabecilla del grupo de las pesquisas policiales.

La investigación comenzó a partir de la denuncia de una ciudadana paraguaya, “víctima de un presunto tráfico ilegal de personas”, y que, iba a ser explotada sexualmente en un club de alterne de la provincia de Alicante. Inicialmente, agentes de la Policía Nacional descubrieron que dos personas, J. M. M. y M. S. O. L., eran los encargados de establecer contacto con un abogado de Paraguay, C. V., quien “se dedicaba a captar a las víctimas y financiar los viajes de mujeres desde Paraguay hasta Alicante”.

Una vez en esta provincia, las mujeres ejercían la prostitución en diversos clubes, según una nota de la comisaría de Alicante. A algunas de las mujeres se les facilitaban sustancias estupefacientes para su venta entre los clientes. El detenido J. M. M. pasaba semanalmente por los locales para recoger los beneficios obtenidos por la venta de droga, que el grupo podría estar invirtiendo en la compra de propiedades en Paraguay.

Tras las investigaciones, los agentes desplegaron un dispositivo policial en Orihuela donde fueron detenidos cuatro de los cinco acusados. Asimismo, la Policía Nacional intervino pequeñas cantidades de cocaína dispuesta para su venta en bolsas, así como útiles para su confección y diferentes piezas de hachís en el domicilio de uno de los arrestados. La policía ha informado de la detención de un funcionario de un juzgado que podría haber puesto en conocimiento de J. M. M. las pesquisas que se estaban llevando a cabo.