Cataluña aprueba un proyecto de ley inspirado en el contrato de integración

ABC, P. A. O., 27-07-2009

VALENCIA. Cataluña aprobó hace una semana el proyecto de la ley de acogida de inmigrantes, una norma que permitirá a los extranjeros residentes en la región a aprender catalán se excluye al castellano y cultura catalana. La norma catalana será una adaptación, aunque con especificidades, de la de la Ley de Integración de la Comunidad Valenciana, cuyo espíritu ha sido recogido por el PP nacional consta en el programa electoral popular en las elecciones a la Eurocámara y que ha sido duramente criticada por el PSPV desde que tuvieron conocimiento de su existencia.
Pese a la campaña de desprestigio lanzada por la oposición contra contra el contrato de integración herramienta ya aplicada, con algunas diferencias, en otros países europeos, Cataluña dará la oportunidad (se calcula que la futura ley de acogida estará aprobada a mediados de 2010) a los inmigrantes residentes en la autonomía a conseguir un contrato similar.
Certificado de conocimientos
Así, el Gobierno catalán expedirá un certificado de conocimiento del catalán y de la cultura catalana que podrá ser utilizado para facilitar la inserción laboral y que tendrá validez jurídica en el ámbito competencial de la Generalitat catalana y los entes locales. Objetivo similar al que se plantea en el articulado de la Ley de Integración valenciana al referirse al contrato de integración.
La principal diferencia que existe entre el contrato catalán y el valenciano se sitúa en la lengua de aprendizaje del ciudadano foráneo.
Mientras que la Ley de Integración establece que los participantes en la iniciativa recibirán nociones de castellano y valenciano, en el proyecto de la norma catalana se especifica que la única lengua vehicular será el catalán. Para ello, se crearán 11.700 cursos de catalán. Como posibilidad, «una vez finalizada y acreditada la formación en la lengua catalana», se explica que «quienes lo soliciten» podrán adquirir «competencias básicas» en castellano.
Además, al igual que en la norma valenciana, los extranjeros inscritos en la futura iniciativa catalana, que también será de carácter voluntario, recibirán información sobre sus derechos y deberes.

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