La mayor banda de ladrones de cobre

El Mundo, PABLO HERRAIZ, 10-07-2009

Sucesos. La Guardia Civil ha detenido a 55 personas y recuperado más de 20.000 kilos de cable telefónico robado. Ha resuelto unos 50 robos que dejaron incomunicadas a varias poblaciones La Guardia Civil ha culminado la mayor operación que ha habido contra el robo de cable de cobre. En total ha arrestado a 55 personas, a las que se acusa de perpetrar más de 50 sustracciones de cable telefónico. Durante sus golpes dejaron incomunicadas a varias poblaciones.


Los agentes de la Comandancia de Tres Cantos han recuperado más de 20 toneladas de cable, principalmente de teléfono, aunque también han hallado sustraídas de granjas solares, donde hay bobinas con muchos metros de cobre.


La operación se ha llamado Gallinero y se ha desarrollado en el poblado del mismo nombre, al lado de la Cañada Real. La han realizado el Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) de la Guardia Civil y el Juzgado de Instrucción número 3 de Madrid.


Se trata de un poblado chabolista de gitanos rumanos. De los detenidos, 48 se dedicaban a robar, según los investigadores, mientras que los otros siete se encargaban de la receptación del cobre.


Como en el pasado ha habido varias muertes de gente que robaba cable (todos electrocutados), estos no se acercaban a los circuitos de alta ni media tensión. El comandante Javier Rogero, jefe de la Policía Judicial en Tres Cantos, explicó ayer que «en una ocasión llegaron a robar ocho kilómetros de cable de teléfono, y dejaron sin línea a miles de personas».


El robo de cobre es muy rentable porque se vende a unos 2,5 ó 3 euros el kilo, y los cables, sobre todo los gruesos, pesan mucho.


Por eso la operación no ha dejado de lado a los que lo compran. De hecho, la investigación comenzó en las chatarrerías. Se han registrado tres en Madrid y una en Toledo. La estructura de la banda, según el Seprona, estaba perfectamente organizada.


Unos buscaban lugares para robar, otros arrancaban el cable, otros lo transportaban, y los últimos lo quemaban para quitarle el aislante y venderlo luego al peso. Les imputan robos en Madrid, Castilla y León, Castilla – La Mancha, Comunidad Valenciana y Andalucía. Hace dos semanas se arrestó a las primeras personas, y el pasado fin de semana a los demás. Siete están ya en prisión incondicional.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)