Detenido por contratar extranjeros de manera irregular en Gipuzkoa

Diario de noticias de Gipuzkoa, 08-07-2009

donostia. Un empresario de nacionalidad pakistaní, de 46 años de edad y vecino de Eibar, M.I., fue detenido el pasado 1 de julio por el Cuerpo Nacional de Policía de Irun acusado de contratar de manera irregular mano de obra extranjera. Además, otras siete personas fueron arrestadas por encontrarse en situación irregular en el Estado.

En un comunicado, la Delegación del Gobierno central en el País Vasco informó ayer de que, por investigaciones propias del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría de Donostia, adscrito a la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras, se tuvo conocimiento de que varias empresas de la construcción usaban mano de obra extranjera en situación irregular en el Estado, “pagando sueldos por debajo de lo establecido en los convenios, no dándoles de alta en la Seguridad Social, evadiendo el pago de impuestos” y dejando a estos trabajadores “sin ningún tipo de cobertura laboral o socio – sanitaria”.

Según explicó esa misma fuente, la labor de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía comenzó hace casi un año y finalizó el pasado día 1 de julio con la detención del empresario M.I. de nacionalidad pakistaní, vecino de Eibar y de 46 años de edad.

Al parecer, en la empresa de M.I., Deflah, que había sido objeto de diferentes denuncias, fueron identificados una treintena de trabajadores. Asimismo, los investigadores pudieron localizar varios pisos patera en la localidad de Elgoibar, en la que vivían hacinadas estas personas a cambio de diferentes cantidades que aumentaban los beneficios del empresario detenido.

En el transcurso de la operación fueron detenidas cinco personas de nacionalidad pakistaní domiciliadas en Zarautz y otras dos, procedentes de Ecuador y Bolivia, domiciliadas en Bilbao. Todas ellas contaban con edades comprendidas entre los 27 y los 37 años.

La delegación del Gobierno central en la Comunidad Autónoma Vasca apuntó que se dio cuenta de estos hechos al Juzgado de Instrucción de Guardia, a cuya disposición pasó el empresario detenido por un delito Contra los Derechos de los Trabajadores.

En cuanto a los otros siete ciudadanos extranjeros, les fue de aplicación la normativa de Extranjería, por encontrarse de forma irregular en el Estado.

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