La fiesta comenzó con un pasacalle típico de Ecuador. Las mujeres, ataviadas con vestidos en tonos blancos y azules, se encaminaron a la plaza de Untzaga destrás de su bandera, orgullosas de ofrecer a todos los eibarreses una muestra de su cultura y tradición. Tras ellas, una pareja de Venezuela interpretando un baile típico del llano. Poco a poco, una buena parte del folklore latinoamericano se dejó ver en el centro de Eibar gracias al trabajo de la Asociación de Mujeres Latinoamericanas Lacasium, quienes un año más han puesto su granito de arena en el programa festivo de San Juan.

El festival fue seguido por numerosas personas. Las gradas de la plaza ya se encontraban llenas mucho antes del comienzo del festival, lo que hacía que el nervisiosismo entre las bailarinas fuera en aumento según avanzaban los minutos. Además, y según explicaron algunas de los asociadas, este año era especial porque iban a mostrar una serie de bailes nuevos, lo que ha supuesto un gran esfuerzo para ellas en cuanto a los ensayos. «Ensayamos todos los fines de semana. Además de aprender los bailes también nos sirve como terapia, estamos todo el tiempo trabajando y apoyándonos», explicaron.

Aunque ayer tomaron parte cerca de una veintena de personas en los bailes, la Asociación Lacasium está formada en la actualidad por más de cincuenta socias. «Hemos tenido muy buena aceptación, entre todas nosotras pero también entre la gente de aquí, algo que para nosotras es muy importante. Al principio de constituirnos fue un poco como lanzarse a la aventura, a ver qué salía, pero ahora estamos muy contentas. Somos muchas y la gente está muy contenta, nos ayudamos mucho», explicó la actual presidenta de la asociación Jackelin Ortiz, minutos antes de comenzar el espectáculo. Constituída en marzo de 2007, Lacasium surgió con la intención de velar por un colectivo, las mujeres latinoamericanas, cuya presencia es cada vez más grande en Eibar y en todo el Bajo Deba. Entre sus objetivos se destaca el mejorar la calidad de vida de sus asociadas, así como incidir en la formación laboral y en la integración social.

Las asociadas en Lacasium proceden de diferentes países latinoamericanos: Argentina, Bolivia, Colombia, Cuba, Ecuador, República Dominicana o Venezuela.

Otras actividades

Tras su constitución, Lacasium se integró en la Mesa de la Mujer del Ayuntamiento de Eibar, algo que le ha permitido llegar a más mujeres así como tomar parte en numerosas fiestas y reuniones de asociaciones, tanto en Eibar como en pueblos vecinos. Además de la actividad del baile, Lacasium también organiza cursillos de bisutería pero también incide en mejorar la situación de la mujer latinoamericana.

La regularización del colectivo es uno los problemas que se abordan desde la asociación. «Lacasium ayuda mucho en el tema de los papeles, en el del trabajo en general. Nos apoyamos mucho y últimamente estamos haciendo muchos cursos en la Escuela de Armería, que no nos quedemos sólo con el trabajo que realizamos en las casas», afirmaron algunas de las asociadas. Desde hace un tiempo, Lacasium mantiene un convenio de colaboración con Armeria Eskola para impartir clases de la rama de mecanizado a las mujeres latinas. «Estamos todo el tiempo tratando de actualizarnos».