Las estadísticas sobre movimientos migratorios en España reflejan de forma concluyente el impacto de la crisis en los flujos y contrataciones en origen, que han registrado un desplome muy acusado y una tendencia decreciente para todo 2009. Paralelamente, el mercado laboral interno está dando muestras de retomar posiciones en caladeros de trabajo que por su escasa cualificación profesional y retribución habían ido abandonando los nacionales en los últimos años en beneficio de la mano de obra foránea. Sin embargo, la Administración admite las dificultades para evaluar el alcance real de los movimientos de retorno a sus países de origen de inmigrantes provenientes de áreas de la Unión Europea, lo que puede falsear las cifras globales de incremento o baja de personas extranjeras en el mercado de trabajo. Revisar los mecanismos de regreso existentes e incrementar el control de los flujos migratorios contribuiría a hacer más eficaz el Plan de Retorno Voluntario, que hasta ahora ha tenido una pobre acogida, y fijar con mayor precisión el efecto en la comunidad inmigrante de la contracción económica.