Setenta y cinco proyectos optan este año a las ayudas económicas contempladas en la segunda edición de ‘País Vasco. Un alma solidaria’, una iniciativa puesta en marcha por EL CORREO en colaboración con la Consejería de Vivienda y Asuntos Sociales del Gobierno vasco, la Asociación de Municipios Vascos – Eudel y la BBK. Las propuestas corresponden a setenta organizaciones diferentes que dibujan un espectro representativo de la situación que vive actualmente el Tercer Sector vasco. A ese respecto, cabe señalar que prácticamente todas las áreas de intervención resultan presentes, lo que implica una gran variedad temática, aunque también destaca que el 28% de las demandas, el mayor porcentaje, se corresponde con cuestiones relacionadas con la exclusión social.

En segundo lugar por el número de solicitudes aparecen aquellas iniciativas vinculadas con intervenciones en el ámbito de la infancia y de la adolescencia, con un 16% del total de las recibidas. En tercer lugar, sobresalen también los programas asociados a las personas inmigrantes y a las que sufren alguna discapacidad o están enfermas. No obstante, es preciso advertir de la diversidad de los abordajes en cada uno de los capítulos, desde las campañas de sensibilización del problema a las carencias importantes como la vivienda. También aparecen los talleres ocupaciones o el fomento de las actividades de ocio y tiempo libre, un área de especial relevancia en esta convocatoria.

Por territorios

Por distribución geográfica, es precio señalar que casi el 75% de las demandas proviene del territorio vizcaíno, un 20% se reparte entre Álava y Guipúzcoa y el porcentaje restante corresponde a organizaciones que cubren toda la Comunidad Autónoma. Aunque proliferan las entidades radicadas en el barrio de Bilbao la Vieja o Barakaldo, también abundan las asociaciones pequeñas, de carácter local, independientes o autónomas, pero vinculadas legalmente a organizaciones mayores. En cualquier caso, unas y otras presentan un solo proyecto. En la primera edición, las grandes y medianas ONG tuvieron un mayor peso y, a menudo, concurrían con varias fórmulas que se correspondían con diferentes planos de actuación.

La innovación, la viabilidad económica o el impacto social son algunas de las características fundamentales que han de ser valoradas por el jurado, encargado de escoger los cinco proyectos beneficiados con un montante total de 100.000 euros a repartir entre todos ellos. Además, este periódico divulgará en sus páginas la labor de los galardonados con el fin de que se pueden sumar otros recursos, tanto económicos como humanos. El fallo definitivo se hará público a finales del próximo mes de septiembre.

Además de favorecer económicamente las actividades de los colectivos, el propósito de ‘País Vasco. Un alma solidaria’ es, desde su origen, la sensibilización de los lectores de EL CORREO en torno al grave problema de la exclusión social en cualquiera de sus vertientes.

La relación de premiados en el 2008 demuestra el alcance y variedad de tales campos de acción. La Comisión Ciudadana Antisida de Vizcaya; Bidesari, una entidad que trabaja a favor de la reinserción social de personas reclusas con problemas de marginación; Berpiztu Elkartea, empeñada en la integración de inmigrantes en el barrio donostiarra de Altza; la Asociación Alavesa de familiares y personas con enfermedad mental y el programa ‘¿Te atreves?’ de Cáritas Diocesana de Bilbao fueron los proyectos favorecidos por el fallo final.