Los contactos fueron suspendidos por orden de la Administración Bush hace cinco años

Barack Obama ha decidido reabrir el diálogo con el Gobierno cubano sobre la inmigración ilegal, después de que este fuera clausurado en el 2004 por el ex presidente George W. Bush.

El viernes, el Departamento de Estado divulgó que la petición de reabrir las conversaciones tiene como objetivo «reafirmar el compromiso de ambas partes con la emigración segura, legal y ordenada». La portavoz de ese departamento estadounidense aclaró que el presidente Obama «quiere que hagamos todo lo que esté en nuestra mano para apoyar el deseo del pueblo cubano de vivir en libertad».

Las conversaciones semestrales sobre emigración habían comenzado entre los dos países después de lo que sucedió en el verano de 1994 cuando miles de cubanos se lanzaron a cruzar el estrecho de Florida en endebles botes. Las reuniones por esta cuestión fueron las relaciones de más alto nivel entre ambos países durante esos años, ya que Estados Unidos y Cuba no mantienen contacto diplomático.

Pero, en el 2004, Bush suspendió este diálogo en protesta por las condenas del Gobierno cubano a 75 disidentes. Además, también por entonces Fidel Castro criticó duramente a James Cason, en ese momento jefe de la oficina estadounidense de intereses en La Habana, tildándolo de «matón».

La decisión hecha pública el viernes por el Gobierno estadounidense sigue a otras tomadas por Barack Obama en los últimos meses y que representan un giro en las relaciones bilaterales. Primero fue la derogación de la ley que impedía a los cubano estadounidenses viajar a Cuba y enviar remesas cuando quisieran.

Ingreso en la OEA

El segundo paso es este de la reanudación de las conversaciones de alto nivel sobre inmigración. Y el tercero podría ser el reingreso de Cuba en la Organización de Estados Americanos, la OEA. El 2 de junio se celebra una reunión de esta organización en Honduras en la que se tratará la cuestión y a ella asistirá la secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton.

La postura de Clinton en Honduras puede suponerse después de que esta semana pasada dijera ante los legisladores de su país que Estados Unido apoyará el reingreso de Cuba en la OEA siempre que el régimen castrista apruebe reformas democráticas y libere a los presos políticos.

Por su parte, José Miguel Insulza, secretario general de la OEA, afirmó recientemente que la disposición que se aprobó para impedir la pertenencia de Cuba a este club se tomó en 1962, durante la guerra fría, en un contexto mundial que ya no existe. Insulza cree que «es el momento de encontrar una nueva fórmula» para Cuba.