ANTONIO BAQUERO
BARCELONA

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha precisado la confusa propuesta hecha el lunes sobre la posibilidad de dar ayudas a los inmigrantes rumanos para que regresen a su país. Ayer, Corbacho concretó el plan señalando que el apoyo al retorno consistirá en permitir que los rumanos que hayan perdido su empleo aquí puedan cobrar el subsidio de paro en Rumanía. Ahora, en España hay 71.000 rumanos parados, de los que 40.000 cobran la prestación. Corbacho avanzó que el Gobierno trabaja para que también pueda aplicarse esa iniciativa al colectivo de inmigrantes búlgaros.
A su regreso a Madrid tras una visita oficial a Rumanía, el ministro Corbacho explicó que la posibilidad de cobrar el paro en origen será una de las primeras medidas a desarrollar a raíz de los acuerdos firmados durante ese viaje. El objetivo de la iniciativa, resumió, es “explorar nuevas posibilidades que faciliten que el retorno pueda ser atractivo”.

BUSCAR EMPLEO
La condición es que “se comprometan a buscar activamente” un empleo en Rumanía, algo que será controlado por las autoridades de ese país. El ministro ha avanzado que esa medida “es probable que se ponga en marcha pronto”, aunque será necesario “realizar algunas modificaciones legales en Espa-
ña”. Esto obedece a que, para poder cobrar el subsidio, hay que residir en España o, al menos, estar aquí para sellar en el INEM.
Hasta ahora, ni rumanos ni búlgaros podían beneficiarse del plan de incentivo al retorno voluntario que permite capitalizar el paro, pues se exige un compromiso de no regresar a España en cinco años, algo que choca con la libertad de movimientos de los ciudadanos de la UE.