DV. El Salón de Plenos del Ayuntamiento celebró ayer la octava audiencia pública a 160 jóvenes de la ciudad, acto con el que culminó el proceso que a lo largo de este curso han desarrollado sobre el tema de la diversidad. Estos alumnos pertenecientes a los centros de La Anunciata, Arantzazuko Ama – Martutene, Educadores de calle de Altza, Instituto de Altza, Antigua Luberri, La Asunción, AGI, San Luis La Salle y Presentación de María han venido trabajando, informándose, reflexionando, debatiendo y elaborando propuestas al Ayuntamiento que han quedado recogidas en un manifiesto que ayer entregaron al alcalde y a la corporación municipal.

El manifiesto, denominado Convivir en la diversidad, recoge una decena de propuestas para mejorar la convivencia y reducir la discriminación social. Así, proponen que se cree un «código de convivencia ciudadana más claro y severo» e instan a los donostiarras a que «reclamen justicia y denuncien los casos de machismo».

También solicitan mayor protección para los menores inmigrantes y más ayudas para las familias de acogida de estos jóvenes, además de elevar su edad de emancipación hasta que finalicen los estudios universitarios para que puedan mantenerse por sí mismos.

Asimismo, los jóvenes sugieren que se cree una ONG de «traductores sin fronteras» para facilitar la comunicación entre personas de diferentes países que hablan idiomas distintos y que se organice una fiesta intercultural cada domingo en un barrio diferente de San Sebastián.