El área de Inmigración del Ayuntamiento de Durango se ha propuesto impulsar los espacios de encuentro y participación social de una veintena de jóvenes extranjeros y autóctonos para incentivar sus relaciones personales y el conocimiento que tienen de otras culturas. Con este fin ha puesto en marcha un taller de teatro a cargo de la compañía local Karrika que permitirá afianzar la convivencia de estos chavales durante cerca de tres meses. Éste es el tiempo que invertirán en preparar un espectáculo que acabará representándose delante de público.

Algunos de los objetivos específicos del taller, dirigido a jóvenes de entre 16 y 18 años, son el intercambio de experiencias, promover la utilización «coloquial» del euskera y reforzar la empatía entre participantes, apuntó la teniente de alcalde, Mari Jose Balier. A través de él también se analizarán las habilidades interpretativas de los jóvenes. Es por ello que Karrika les enseñarán diferentes técnicas para desinhibirse o improvisar.

Esta iniciativa del área de Inmigración tiene su origen en un taller de cine que se llevó a cabo hace dos años para reflejar la visión de un grupo de jóvenes sobre la diversidad cultural de la villa, y cuyo fruto fue el documental ‘Kebab al pil pil’. Para generar debate, involucrar a la ciudadanía y «aportar nuevas ideas en torno a la interculturalidad por medio de acciones positivas», sus responsables también diseñaron otra experiencia a la que bautizaron como ‘Jaki tori tori’.

A través de este juego de palabras que nace de la salsa japonesa ‘yakitori’ y las palabras en euskera jaki (algo para picar) y tori (ofrecer), se ofreció una cena para 150 personas que permitió compartir recetas de la cocina local con otras de Bolivia, Colombia, Ecuador, Ucrania, Guinea y Senegal.