Las elecciones de Ecuador también se deciden en territorio español

El Mundo, ANA DEL BARRIO, 20-04-2009

Los inmigrantes eligen el domingo a su presidente y representantes en la Asamblea Madrid


En cuestión de días, Dora Aguirre puede saltar de una humilde ONG al Parlamento ecuatoriano. Las elecciones de este país latinoamericano también se juegan en España y, por este motivo, muchos inmigrantes han saltado a la arena política. Los 427.718 residentes ecuatorianos están llamados a las urnas este domingo y, por primera vez, no sólo votan por su presidente, sino que también pueden elegir a dos diputados de la Asamblea Nacional que representarán a los inmigrantes en el exterior.


La campaña ya ha comenzado y ciudades como Madrid y Murcia, las que tienen una mayor población ecuatoriana, están empapeladas con carteles de Lucio Gutiérrez, el coronel retirado que se presenta a los comicios, o del presidente Rafael Correa dando la mano a Dora Aguirre, una ecuatoriana que lleva 12 años en España y que forma parte de la candidatura oficialista del presidente.


Dora tiene una doble vida. De noche trabaja en una residencia de ancianos; de día, se dedica a sus labores en la ONG ecuatoriana Rumiñahui y, ahora, además, está centrada en la campaña electoral.


«Estos comicios son muy importantes. Es la primera vez que los migrantes en el exterior podemos tener representantes en la Asamblea Nacional. Nuestra preocupación ahora es buscar alternativas para el retorno de los que quieren volver y dar soluciones al tema del paro», explica Dora.


Las elecciones llegan en un momento crucial para los ecuatorianos, uno de los colectivos más afectados por la crisis. Muchos de ellos se encuentran en un callejón sin salida: han perdido su trabajo, tampoco cobran la prestación por desempleo y han dejado de pagar la hipoteca. Pero, ante esta situación desesperada, tampoco pueden regresar a su país porque siguen encadenados al banco con el que se endeudaron.


Este es el caso de Carlos Zapata Lucio, de 54 años, un carpintero ecuatoriano que llegó a España en 1999 y que siempre ha trabajado en el sector de la construcción. Hasta que en diciembre de 2008, llegó el mazazo del desempleo.


«Desde hace cinco meses no puedo pagar la hipoteca y en junio se me termina el paro. Quiero dar el piso al banco en dación de pago, pero no me responde. Si en junio no encuentro trabajo, volveré a mi país. Ya he mandado a dos de mis hijos de vuelta», asegura Zapata.


Karina Guerra conoce de cerca los problemas de sus compatriotas y quiere buscar soluciones a la crisis. Esta periodista de 33 años es otra de las candidatas que se presenta para ser elegida al Parlamento ecuatoriano por el Movimiento Popular Democrático, un partido de izquierdas. «Las deudas hipotecarias hacen que la situación se vuelva insostenible para las familias. Hay que dar facilidades para el retorno y facilitar créditos con bajos intereses», explica.


Ella – a diferencia de Dora Aguirre – es muy crítica con la política del presidente Correa, que opta a la reelección, y también con Zapatero: «El Gobierno socialista ha defraudado a los migrantes y nos ha dado la puñalada por la espalda. Ahora quiere que nos vayamos, pero no lo haremos. Al menos el PP fue más franco en su mensaje, pero el PSOE ha tenido un doble discurso con los inmigrantes».


Karina considera que Rafael Correa es un político de derechas «que se ha disfrazado de democracia y de izquierdas. En Ecuador se está gestando una dictadura».


Sin embargo, Dora defiende la labor de Correa porque considera que está haciendo reformas y aumentando la participación política de los ciudadanos. Sus recetas para salir de la crisis pasan por la creación de cooperativas.


Mientras tanto, la crisis aprieta a las familias. «Apenas tenemos para comer. Tan sólo pido al Gobierno que nos ayude con el billete de vuelta. Pero los políticos sólo se nos acercan cuando nos necesitan para las elecciones y luego, ni nos conocen», afirma Luis Ochoa, otro ecuatoriano de 54 años que se ha quedado en el paro.


elmundo.es


Vídeo:


Vea a las candidatas Aguirre y Guerra.

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