santiago de compostela. Agentes de la Policía Nacional desarticularon ayer en A Coruña un grupo organizado que prostituía a mujeres y les obligaba a vivir en condiciones infrahumanas. En la operación fueron detenidos tres hombres y tres mujeres, y fueron liberadas al menos diez “esclavas sexuales”.

Uno de funcionarios de la Unidad contra Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales, encargada de la intervención policial, salvó la vida a una de las jóvenes, que intentó tirarse por una ventana situada a ocho metros de altura “arriesgando su propia vida y agarrándola en pleno vuelo por los brazos”.

El agente, que sufre rotura de fibras musculares, declaró: “vinimos a sacarlas de aquí, no puedes pararte a pensar en las consecuencias, podíamos haber caído los dos, pero no fue así y lo volvería a hacer”.

Los detenidos son considerados autores de Prostitución Coactiva y Explotación Sexual bajo el ejercicio de la Prostitución, Lucro Prostitución Ajena, Falsificación de Documentos, Delitos contra los derechos de los trabajadores, Favorecimiento de la Inmigración Ilegal y Tráfico y Trata de Seres Humanos con fines de explotación laboral o sexual.

La Policía señaló que las mujeres no podían ducharse entre cliente y cliente y sólo disponían de un juego de sábanas por día. Además, la banda había creado una empresa con la que blanquear el dinero obtenido con la explotación sexual.

Al parecer el grupo cobraba multas de 20 euros a las mujeres por salir más de una hora al día al exterior, no les permitían usar la cocina para comer fuera del horario establecido, les obligaban a trabajar hasta 20 horas seguidas y les obligaban a mantener relaciones sexuales sin preservativo y a tolerar el consumo de drogas por parte de los clientes en su presencia. >efe