La pos fascista Alianza Nacional se unirá a Fuerza Italia para dar origen a Pueblo de la Libertad

El partido italiano Alianza Nacional (AN), de derecha, anunció ayer su disolución para fusionarse la semana próxima con el conservador Fuerza Italia (FI), del primer ministro, Silvio Berlusconi, unión que dará origen al partido Pueblo de la Libertad (PDL), homónimo de la coalición en el poder.

El presidente de la Cámara de los Diputados y fundador de Alianza Nacional, Gianfranco Fini, fue quien puso fin ayer con un discurso a los quince años de su partido, y apostó porque la formación política en la que ahora converge, PDL, no tenga un pensamiento único.

El PDL debe ser «un partido amplio, plural, integrador, unitario. Pero unitario no quiere decir un partido con un pensamiento único. Hay una contradicción entre pensamiento único y pueblo de la libertad, porque con el pensamiento único falta la libertad», dijo Fini en Roma durante el último congreso de AN.

«El PDL no puede ser solo un partido de derecha: algunos valores de derecha deben ser el germen del nuevo partido, pero serán solo un valor añadido», prosiguió.

«El PDL tiene un líder que es Berlusconi y esto es evidente. Pero el mismo Berlusconi sabe perfectamente que un liderazgo fuerte y reconocido no puede en ningún caso suponer el culto a la personalidad», afirmó Fini.

«Una cosa es ser líder y otra pensar que solo el líder puede contribuir con ideas, con compromiso, con las soluciones políticas, con síntesis», añadió.

Fini apostó por favorecer el diálogo y el entendimiento y no el enfrentamiento en las políticas de inmigración del PDL, que nace de la coalición que gobierna actualmente en Italia.

Inmigración

La inmigración «es un gran desafío que no se afronta con la retórica, con los eslóganes o con los músculos, sino con la capacidad de dar una respuesta en términos culturales», incidió Fini.

«Si queremos ser coherentes con lo que decimos, es decir, que lo que prima es siempre y únicamente la persona, entonces no se puede discriminar al inmigrante, aunque sea indocumentado», añadió.

Fini, quien se mostró «emocionado al retomar la palabra diez meses después de la última vez» que habló frente a un grupo de su partido, rindió homenaje a la «pasión y al sacrificio» de los militantes que hicieron posible su llegada al Gobierno y su elección al tercer cargo del Estado.

Antes de su discurso, el coordinador de FI, Denis Verdini, leyó un mensaje enviado por Berlusconi a sus socios de la extinta AN, formación nacida en enero de 1994 como heredera del pos fascista Movimiento Social Italiano Derecha Nacional. «Queridos amigos de AN, el mío no es un saludo formal, sino un acto de gratitud y de reconocimiento a un partido que después de un largo camino nos permite alcanzar todos juntos una meta grande e histórica», decía el texto del primer ministro italiano.