BRUSELAS, (AFP) –
La Unión Europea (UE) amenazó el lunes con no participar en la conferencia de la ONU contra el racismo, denominada Durban II y prevista para fines de abril en Ginebra, si los documentos preparatorios de la misma no son modificados en el sentido deseado por los europeos.

“Probablemente vamos a enviar ahora las sugerencias de la Unión Europea” concerniente esos textos, declaró el ministro checo de Relaciones Exteriores, Karel Schwarzenberg, cuyo país presidente la UE, al final de una reunión con sus homólogos europeos.

“Si la conferencia está en línea con eso, nos quedaremos. En caso contrario, hay pedidos muy firmes para retirarnos”, agregó.

Alemania forma parte de los países que pidieron el lunes una retirada de la UE de esa conferencia si esos documentos no son modificados en forma sustancial.

Por el momento, los textos “sugieren que no se trata simplemente de racismo, sino que la conferencia podría ser desviada, con tomas de posiciones parciales sobre el conflicto en Oriente Medio o para condenar posiciones europeas o norteamericanas en el mundo árabo – musulmán”, declaró el ministro alemán, Frank – Walter Steinmeier.

“Propondría que renunciásemos a participar en esta conferencia si en las próximas horas o en los próximos días no llegamos a una modificación sustancial de esos documentos”, continuó.

“Algunos países no quieren tomar parte”, confirmó de su lado el canciller sueco, Carl Bildt, explicando que los europeos “unidos” y que tienen “líneas rojas” que deberán ser respetadas para evitar su retirada de la conferencia.

La Primera Conferencia Mundial de Naciones Unidas Contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y la Intolerancia, que se realizó en Durban (Sudáfrica) en 2001, acabó con el abandono de Estados Unidos, Israel y Canadá, que consideraron como anti – israelí la tentativa de algunos países árabes de condenar el sionismo.

Esos tres mismos países ya decidieron boicotear la continuación de aquel encuentro, denominado “Durban II” y a celebrarse del 20 al 24 de abril en Suiza, ya que lo consideran “antisemita”.

De su lado, el Reino Unido ya ha condicionado su presencia a un cambio de rumbo" de los trabajos preparatorios, mientras que Italia también decidió no participar.

Por su parte, el canciller francés, Bernard Kouchner, ya había instado el viernes pasado a los países de la UE a definir una posición común y a establecer una “fecha límite” para decidir si participan o no en esta conferencia.

Francia había precisado que rechazaba “cualquier referencia a la noción de difamación de las religiones, porque ese concepto es incompatible con la libertad de expresión y conciencia”, al igual que “cualquier estigmatización de Israel” y “cualquier expresión de racismo”.