BARCELONA – De las 329 trabajadoras sexuales que fueron atendidas por el Ayuntamiento de Barcelona durante 2008 en el distrito de Ciutat Vella, 21 asistieron a los cursos de formación para favorecer su recolocación laboral y 16 se reinsertaron definitivamente.
La concejal de Mujer y Juventud, Elsa Blasco, dió a conocer ayer esta cifra y valoró «muy positivamente la mejora y la consolidación» del trabajo en red realizado desde 2006 con la aplicación del Plan de Abordaje Integral del Trabajo Sexual. El incremento de 179 nuevos expedientes referente al 2007 se debe, según Blasco, a «la ampliación de la zona de actuación, de la franja horaria con las salidas nocturnas, de personal con la nueva agente de salud y al aumento de confianza de las prostitutas».
Las prostitutas de origen rumano sigue siendo el colectivo más atendido representando un 37,46 por ciento, seguidas de las latinoamericanas y las españolas.
En 2008, se registró un aumento de demandas laborales y formativas, de servicios sociales y de alojamiento. En relación a la recolocación laboral, por la que han pasado 69 mujeres en los últimos tres años, más de la mitad encontraron trabajo, la mayoría en el sector de los servicios: limpieza, dependientas o asistentes en geriatría.
Desde que en 2006 nació el plan de la ordenanza de civismo se han abierto 546 expedientes. Mientras en 2008 el presupuesto fue de 484.850 euros, en 2009 el Consistorio destinará unos 600.000 y ampliará el personal.
Por su parte, el PP considera que «el Ayuntamiento actúa con complejos». «El actual plan carece de medidas y no tiene prioridades claras para abordar el problema de raíz», dijo la portavoz del grupo municipal, Ángeles Esteller.