Barcelona

La Audiencia de Barcelona absolvió ayer a cuatro de los quince jóvenes acusados del ataque racista a una familia magrebí ocurrido en junio de 2002 en Sant Vicenç de Castellet (Barcelona), después de que la fiscalía y la acusación particular retiraran todos los cargos contra ellos.

En el último día del juicio por el ataque racista, en el que fue brutalmente apaleado un hombre marroquí, las acusaciones han retirado los cargos que inicialmente mantenían contra Aitor R., José María P., Jonattan C. y Javier C., al considerar que no hay prueba alguna de que participaran en la agresión.

Por este motivo, la presidenta del tribunal ha absuelto in voce a esos cuatro jóvenes, uno de los cuales, Aitor R., estuvo implicado en otra agresión racista a un ciudadano guineano en Sant Vicenç de Castellet en 2001 y actualmente cumple unja pena de prisión provisional desde el pasado sábado por haber herido gravemente a una persona en una pelea.

Para el resto de imputados, el ministerio público ha mantenido su petición de condena por intento de homicidio, incendio en grado de tentativa y amenazas, por lo que solicita penas de entre dos y 19 años de prisión, en función del grado de participación de cada uno de ellos en los distintos delitos.