Desciende el número de menores inmigrantes que llegan a Vizcaya

Se registraron 440 adolescentes extranjeros en riesgo de desamparo, 15 menos que en el ejercicio anterior

El Correo, DAVID S. OLABARRI, 13-02-2009

Puede que sea algo «coyuntural», una situación pasajera que podría cambiar repentinamente en los próximos meses. Pero lo cierto es que en 2008 descendió, por primera vez en varios años, el número de menores inmigrantes no acompañados que ingresó en los servicios asistenciales de la Diputación vizcaína. En concreto, 440 chavales extranjeros – la gran mayoría de edades comprendidas entre 15 y 17 años – llegaron al territorio durante el pasado ejercicio, 15 menos que en 2007.

Pese a este leve descenso, el Departamento de Acción Social atendió en 2008 a un número similar de adolescentes extranjeros en riesgo de exclusión social. De hecho, 359 menores (20 más que en 2007) se integraron en la red foral de centros de acogida, compuesta por 45 viviendas y pisos (7 más que hace un año). Estos servicios, en todo caso, no se limitan a inmigrantes. La institución foral también prestó distintos tipos de ayuda a jóvenes vizcaínos en situación de desamparo. En términos globales, 1.200 adolescentes recibieron alguna clase de atención. De los mismos, 1.019 permanecieron en centros, pisos o con familias.

Estas cifras tampoco permiten lanzar «las campanas al vuelo». Sobre todo, después del colapso que se registró hace sólo unos meses en los centros forales, cuando se mostraron incapaces de asumir la tutela de todos los menores que llegaban al territorio. En este momento, en cambio, la situación de los servicios residenciales es «sostenible», según explicó ayer Juan María Aburto, antes de reconocer la imposibilidad de atender una demanda «ilimitada».

El máximo responsable de Acción Social aprovechó la presentación del balance anual para subrayar la importancia de que todas las administraciones se impliquen en esta «problemática». En este sentido, Aburto recordó que Vizcaya es el segundo territorio español – sólo superado por Canarias – que acoge un mayor número de menores en relación a su población. Una situación que, a su juicio, debe ser abordada de forma conjunta para conseguir elaborar un sistema que permita una distribución de los menores por provincias más equitativa.

«Proyecto laboral»

En este contexto, el diputado recordó el drama y las dificultades que rodea la llegada de muchos de estos adolescentes, cada vez chicos más pequeños que se ven apartados de su familia y de su entorno. «No es un itinerario bonito», enfatizó. Aburto explicó que en los últimos años también está cambiando el «perfil» de los menores. Según dijo, muchos de los que llegaban a Vizcaya hasta hace unos meses procedían de zonas urbanas del Magreb y presentaban «un importante deterioro educativo». Ahora, en cambio, se tratan de chicos menores de 15 años que proceden de zonas rurales y que «traen un proyecto claro de formación laboral y perspectiva de empleo».


d.s.olabarri@diario – elcorreo.com

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