VALENCIA- Los Grupos Greco Levante y Greco Baleares de la Policía Nacional, en colaboración con la UDEV Central, y las Comisarías de Denia y de Barajas han desarticulado una organización criminal especializada en robos con fuerza en viviendas y locales comerciales. La operación se realizó en dos fases, ya que los criminales estaban altamente especializados, divididos en células, y utilizaban «técnicas militares». El saldo total de detenidos ha sido de 25, todos de origen rumano. En la primera parte de la operación, realizada en verano, se arrestó a 16 personas y en la segunda a nueve: cinco en Ibiza, tres en el Vergel (Alicante) y uno en Madrid. Según ha podido saber LA RAZÓN, entre ellos se encuentra el supuesto jefe del entramado criminal, un hombre de 34 años identificado como Mijai V. S., al que detuvieron mientras trataba de escapar en el aeropuerto de Barajas. La «operación Salto» la comenzó hace un año en Denia, Alicante, el Greco Levante. Los agentes tuvieron conocimiento de que para los asaltos la organización se dividía en «comandos», al estilo militar. Unos hacían labores de captación de información, normalmente realizando pequeñas reparaciones en las casas, otros se encargaban de la vigilancia, un tercer grupo recorría la zona, y un cuarto consumaba el robo. Para entrar en las casas utilizaban desde inhibidores de frecuencia con cuatro antenas, muy sofisticados, para inutilizar las alarmas, hasta equipos de ultrasonidos que ahuyentaban a los perros guardianes. Así, los ladrones consiguieron llevar a cabo, al menos, 22 robos en chalés de Asturias, Santander, Zamora, Cáceres, Toledo, Denia e Ibiza. Entraban en viviendas de extranjeros, sobre todo alemanes, que sabían que estaban vacías. Una vez perpetrados los robos, el material sustraído era guardado en almacenes que la banda tenía alquilados. En concreto, la Policía halló tres de estos escondites, uno en cada punto operativo en Vergel, Ibiza y Madrid. En ellos depositaban los objetos robados hasta que fuera seguro sacarlos.